Ya habían pasados las festividades de año nuevo, un hombre se divertía con algunos artefactos explosivos conocidos como “méndigos”, al tratar encender uno, no lo arrojó a tiempo y le estalló en la mano, le ocasionó amputación de los dedos de la derecha.
Varios testigos del accidente se acercaron para tratar de prestarle ayuda, otros llamaron al 911 de atención a emergencias, la llamada fue pasada a personal paramédico, el cual desde la presente administración se encuentra en guardia las 24 horas. Los hechos ocurrieron en el barrio de La Piedad.
De inmediato se trasladó una ambulancia con personal paramédico para atender la emergencia, al llegar encontraron a un hombre N. N., quien cuenta con 37 años de edad, presentaba la mano derecha desflorada, con ausencia de los dedos, estaban desperdigados a unos metros de distancia.
Sin perder tiempo le aplicaron los primeros auxilios, fue trasladado a un hospital cercanos para recibir atención médica, pues presentaba abundante sangrado.
Llegaron también agentes de la Dirección General de Seguridad Pública Municipal como primeros respondientes, fueron enterados que en realidad todo se debió a un lamentable accidente, pues el lesionado fue víctima de su propia imprudencia al manipular sin las debidas precauciones los explosivos.
Cabe señalar que las autoridades mantuvieron estricta vigilancia para evitar la venta de explosivos prohibidos, principalmente “palomas grandes”, “martillos” y los conocidos como “méndigos”, los cuales son altamente peligrosos por la potencia que tienen, pero hubo quienes lograron burlar esa vigilancia y pudieron venderlos.
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