Lo que alguna vez fueron las aguas cristalinas de un río en Tamasopo, hoy son caudales de aguas residuales que contaminan todo a su paso. Los desechos de la cabecera municipal y de lo que generan los ingenios en el municipio terminan en este riachuelo en el barrio Pasquines, el cual ya ha provocado enfermedades en los habitantes de los alrededores.
El fétido olor y el desagradable aspecto al lugar han convertido en este paraíso en un río pantanoso de aguas negras, todo ante la indiferencia de las autoridades municipales. Desde que comenzó su administración, Rosy Chavira, se ha olvidado de las necesidades básicas del municipio como la basura y proveer agua limpia a los ciudadanos.
De acuerdo con los colonos, el agua limpia fue contaminada con aguas negras provenientes de los drenajes de la cabecera municipal y de los ingenios a los alrededores del municipio. Esto, señalan, es un problema de más de medio año; en el mes de junio comenzaron las descargas y desde entonces han pedido al ayuntamiento una solución, pero sus llamados no han servido de nada.
Con las vacaciones de semana santa aproximándose, los habitantes del municipio temen que la creciente contaminación en el municipio afecte la afluencia de turistas a Tamasopo, además de que representa un riesgo sanitario para todos.
Ante la indiferencia y falta de actuación del Ayuntamiento de Tamasopo, piden la intervención de la Comisión Nacional del Agua, así como de la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental, para que intervengan para solucionar este problema de contaminación. Además, hicieron un llamado al diputado Cándido Ochoa Rojas para que no se olvide de ellos y los ayude.
Tal parece que la alcaldesa Rosy Chavira le falló al pueblo, pues tiene convertido a Tamasopo en un muladar donde impera la inseguridad. Sin importarle, ella ya está construyendo un tremendo caseron en el municipio con dinero del pueblo, mientras que ya se perfila para reelegirse.
