Desde el pasado 10 de junio, fueron encontrados los restos de aves difuntas en la costa del pacífico de México, más de 300 cuerpos de aves esparcidos por las diferentes playas y en algunos lugares del mar. Los diferentes organismos de Sanidad y Cuidado Ambiental informan que la principal causa de estos decesos, podría estar directamente relacionada al fenómeno «El niño». Causa principal de los estragos climáticos que hemos vivido estas últimas semanas con la incipiente ola de calor que azota a nuestro país.
El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria, fueron los encargados de llevar a cabo la limpieza y recolección de los cuerpos de las 300 aves que se encontraban tendidas sobre la playa. El número tan grande de aves hizo que inmediatamente se dispararan las alarmas de peligro, así como que las organizaciones de sanidad encendieran los focos rojos, actuando de inmediato ante esta crisis.
Los cuerpos de las aves fueron encontrados en la zona conocida como, litoral del pacífico, en los estados de Chiapas, Guerrero, Michoacán, Jalisco, Sonora, Baja California Sur y Oaxaca. Siendo este último estado el primer lugar en donde las coordinaciones ambientales dieron el aviso de la crisis aviaría. Las primeras hipótesis de la SENASICA, apuntaban a que se podía tratar del virus AH5N1, por la alta patogenicidad que tiene sobre los animales y si tomamos en cuenta que las parvadas emigraban de diferentes sectores como el Norte de América, Chile y algunos otros países de sudamérica, es muy probable que alguna de las parvadas fuera el foco de infección para el resto.
Sin embargo, también existe la opción de que el deceso de estas sea por causas del latente fenómeno conocido como «El niño», responsable de que los efectos de esta tercera ola de calor se sientan con mayor intensidad de lo habitual. Según las autopsias realizadas en las muestras de tejidos de las aves, se encontró que la muerte habría sido por inanición. Ya que debido a las temperaturas elevadas los peces tienen que nadar a mayor profundidad buscando aguas más frías, lo que imposibilita que las aves puedan alimentarse. No hay que cada día se hace más visible el deterioro ambiental en nuestro mundo y nos pone en una situación crítica de que algo que tiene que cambiar pronto o seguiremos viendo fenómenos de esta magnitud y mucho mayores.
Seguiremos informando.