Un grupo de gritones a sueldo se hizo presente la mañana de este jueves 11 de abril durante la sesión ordinaria del Congreso del Estado para exigir a los diputados, a pesar de que no son la instancia correspondiente, cárcel para el ex alcalde Ricardo Gallardo Juárez. Con gritos y pancartas exigían hacerse escuchar y ser atendidos, Martié Hernández fue la que salió al quite.
Sonia Mendoza, presidenta de la Mesa Directiva, les informó que formaran una comisión que sería recibida por la presidenta de la Comisión de Vigilancia, Marité Hernández Correa, a lo que la morenista se negó y decidió dejar su curul para en seguida reunirse con los rijosos y escucharlos.
Los a sueldo le exigieron a Marité que metiera a la cárcel a Ricardo Gallardo y que además leyera un pliego petitorio que ya traían elaborado. La morenista, despistada como ella sola, se sintió de pronto en las clases del COLSAN, cuando aprendió a hacer grupos de choque, malabares y pancartas de protesta. Tomó el pliego petitorio y casi rodando llegó hasta la Mendoza y le soltó “pues quieren que leas esto”. Sonia, que ya se las sabe de todas todas, se le quedó viendo a Marité como escudriñando si de verdad seis meses de labor legislativa no le han servido siquiera para disimular poquito la ignorancia, volteó los ojos como pidiendo paciencia y le dijo “en asuntos generales”. Marité agarró el papelito y volvió con los gritones, les dijo “pos no quiere, pero ahorita lo leemos aquí”.
Así los inconformes, amparados en Marité Hernández y por “el cacahuates” Hervert y Charo Sánchez, que sólo quisieron ser populares y se juntaron al relajo en espera de un poquito de reflectores ya que han pasado inadvertidos para la LXII Legislatura, comenzaron la lectura de su petición.
Marité a todo les dijo que sí. Sí cárcel a Gallardo. Sí investigación contra el fraude. Sí cero corrupción. Sí cero impunidad. Una vez terminado el trabajo, los rijosos se fueron.
Como diputada, Marité Hernández ha dejado mucho que desear, no ha presentado una sola iniciativa que beneficie, realmente, a los ciudadanos, ni siquiera a las mujeres que dice representar y defender. Ahora, gracias a su necesidad de protagonismo se lanzó en contra de la Gallardía y, sin ser la autoridad correspondiente, ya les prometió a los que fueron a gritar, que dará cárcel a Gallardo.