El Partido Revolucionario Institucional (PRI) en San Luis Potosí enfrenta una intensa batalla interna por la dirigencia estatal, con Sara Rocha Medina y Margarita Hernández Fiscal como protagonistas de una contienda que evidencia divisiones profundas en la militancia.
Sara Rocha, actual diputada local y exdirigente del partido, parece llevar ventaja en el proceso al contar con un consejo político afín, presuntamente integrado con personas cercanas y seleccionadas en reuniones privadas. Este consejo ha sido señalado por sus detractores como una herramienta para fortalecer su posición en el proceso interno, lo que incluye la destitución de 18 presidentes de comités municipales.
Por otro lado, Margarita Hernández, regidora y figura que representa a un sector de la militancia crítica, ha denunciado falta de transparencia en la conformación del consejo que definirá la próxima dirigencia. A pesar de estas dificultades, Hernández ha reunido el apoyo de expresidentes del partido, sectores como la CTM y militantes provenientes de diversos municipios del estado, posicionándose como la candidata de resistencia frente al grupo dominante.
Durante el registro oficial, las diferencias fueron evidentes. Sara Rocha se hizo acompañar por militantes y empleados del comité estatal, mientras que Margarita Hernández llegó respaldada por militantes de diversas regiones, destacando el apoyo que ha logrado fuera de la estructura central del partido.
La campaña iniciará el 17 de diciembre y culminará el 4 de enero de 2025 con una elección cerrada al consejo político. Este proceso tiene lugar en un momento crítico para el PRI, marcado por bajos resultados electorales y cuestionamientos a su dirección interna. La elección será decisiva para el futuro del partido en San Luis Potosí, en un contexto donde las fracturas internas parecen agrandarse.
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