En una muestra masiva de descontento, miles de ciudadanos israelíes se congregaron el lunes frente a la Knéset, el Parlamento en Jerusalén, exigiendo la renuncia del primer ministro Benjamín Netanyahu y la convocatoria de elecciones anticipadas.
Bajo un cielo cargado de tensiones, los manifestantes, provenientes de diversas partes del país, inundaron las calles con pancartas y consignas que dejaban clara su postura: «Tú eres el líder. Eres el culpable», coreaban, denunciando la gestión de Netanyahu y su gobierno.
La protesta adquirió aún más fuerza con la participación de familiares de rehenes israelíes en Gaza, quienes reclamaban un acuerdo de alto el fuego con el grupo islamista palestino Hamás para asegurar la liberación de los secuestrados.
Este acto de protesta coincidió con el regreso de los legisladores a la Knéset después de un receso de primavera de seis semanas, subrayando la urgencia y la persistencia del descontento popular.
Desde el inicio de la guerra en Gaza en octubre de 2023, las manifestaciones contra Netanyahu y su administración se han vuelto un evento recurrente durante los fines de semana en Israel, reflejando una creciente insatisfacción con la dirección del país.
La situación se intensificó aún más con la noticia de que el fiscal general de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, solicitó órdenes de arresto contra Netanyahu y el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, por su implicación en la guerra en Gaza. Además, se solicitaron órdenes de arresto contra tres líderes de Hamás.
Esta acción ha generado indignación entre las autoridades israelíes, con Netanyahu acusando a la CPI de antisemitismo por equiparar a los líderes de Hamás con los soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), elogiando al ejército israelí como «el más moral del mundo».
A medida que la presión continúa aumentando sobre Netanyahu y su gobierno, la nación se encuentra en un momento de incertidumbre política y social, con la esperanza de un cambio significativo en el horizonte.
Seguiremos informando.