¿Te has sentido agotado últimamente? Deberías de empezar a preocuparte y poner más atención en ello, ya que podría tratarse de energía negativa o malas vibras que te rodea tu vida. Generalmente cuando está en un entorno pesado donde existen malas vibras, estas tendrán repercusiones en tu vida e incluso puede hacer que te apagues. Para poder mejorar tu vida es importante identificar de donde proviene la mala energía, después te tocará trabar con tu persona por tu bienestar. Esto lo lograrás solo si cambias tu mentalidad y trabajas tus actitudes para desacerté de lo que te hace sentir mal.
Algunas técnicas para acabar con las malas vibras de un lugar, puede ser el purificar los espacioso con humo. Está es una práctica antigua que no solo se considera como una práctica espiritual, si no que también tiene usos científicos. Aunque no lo creas está comprobado que algunas hierbas liberan iones negativos, estas propiedades don creadas por el agua, el aire y la luz solar, es por ello que el humo de algunas plantas da la sensación de tranquilidad.
Si sientes que algo negativo pasa en tu vida es importante que hables contigo mismo, pero recuerda que es un ejercicio para mejorar por lo que no debes de concentrarte en solo mencionarte tus errores pasados. Es importante que al realizar esta plática interna te menciones tus aciertos, tus progresos en la vida y lo que te gustaría seguir realizando para salir adelante. Algunas creencias señalan que estas pláticas ayudan a que tu cerebro se acostumbré a pensar en cosas positivas, lo que hará que poco a poco se vallan los malos pensamientos. En otras palabras empiezas a cosechar inconscientemente buenos pensamientos, está práctica te ayudará en tu vida.
La meditación es también una buena manera de eliminar las malas vibras y incrementar tu paz mental, cuando reconoces tus sentimientos es más sencillo eliminar la mala energía que te rodea. También puedes realizar ejercicios de respiración, los cuales te ayudarán a mantenerte en calma. Cuando respiras oxigenas tu sangre y esto permite cambiar tu estado emocional, así que la próxima vez que te sientas mal el controlar tu respiración ayudará a que te calmes.