El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha planteado la posibilidad de desplegar tropas europeas en Ucrania para respaldar a Kyiv en su lucha contra Rusia, lo que representa una potencial escalada significativa en el conflicto, descrito como el más grande en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Tras una cumbre para discutir sobre Ucrania el pasado lunes, Macron declaró en una conferencia de prensa que aunque los líderes europeos presentes no llegaron a un acuerdo sobre el envío de personal militar, la opción fue discutida abiertamente. «No hay que descartar nada», afirmó, subrayando el compromiso de evitar que Rusia prevalezca en la guerra.
Como parte de esta iniciativa, Macron anunció la formación de una nueva coalición para suministrar a Ucrania misiles de mediano y largo alcance. «Estamos en un momento crítico de este conflicto que requiere que tomemos la iniciativa», agregó.
Con los fondos estadounidenses de $60.000 millones para Ucrania retenidos por los republicanos en el Congreso, Europa se enfrenta a la presión de armar a Ucrania ante el resurgimiento militar ruso. La Unión Europea ya ha comprometido más de $150.000 millones en asistencia a Ucrania, pero el envío de tropas sería un paso radical.
Macron destacó el cambio de postura de las democracias occidentales desde el inicio del conflicto, citando el ejemplo de Alemania, que ha pasado de ofrecer suministros básicos a considerar la necesidad de proporcionar armamento más avanzado a Ucrania.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, advirtió que tal despliegue en Ucrania podría desencadenar un conflicto con Moscú. «Estos países también deben evaluar esto y ser conscientes de ello, preguntándose si esto redunda en los intereses de los ciudadanos de sus países», señaló.
La escalada de tensiones refleja la creciente preocupación por el deterioro de la situación en Ucrania y las implicaciones globales de un posible enfrentamiento más directo entre Rusia y Occidente.
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