Al rojo vivo se encuentra el municipio de Ébano encarnizada que protagonizan diversos grupos criminales que buscan quedarse con la plaza y la negligencia por parte de las autoridades que, lejos de intervenir y atender en forma urgente la situación, han preferido callar y hacerse a un lado dejando en la completa indefensión a miles de familias que sufren los estragos de este fenómeno.
En los últimos días, a través de redes sociales, vecinos del municipio huasteco han dado cuenta de la violencia que se vive en Ébano a cualquier hora del día y en cualquier lugar pues ya no importa si es de día o de noche, de mañana o de tarde, los enfrentamientos armados, las balaceras y las ejecuciones se han convertido en cosa común.
Diversas versiones apuntan a que la ola de violencia que se vive en la región es fruto de la lucha que encabezan dos grupos criminales que buscan quedarse con la plaza; se trata del llamado Cártel del Río y el Cártel Jalisco Nueva Generación quienes serían los responsables del terror que se ha implantado en los alrededores y la sangre que se ha derramado en las últimas semanas.
A pesar de todas las denuncias que se han presentando por estos hechos y el reclamo por parte de la ciudadanía para que los diferentes niveles de gobierno intervengan y controlen la situación, a la fecha no se ha visto respuesta alguna, situación que ha permitido que la ola de violencia vaya en aumento en perjuicio de la población.
Uno de los tantos hechos que confirma la situación que se vive en Ébano es el ocurrido hace algunos días en plena cabecera municipal en donde, por más de una hora, los lugareños tuvieron el alma en un hilo ante las detonaciones y agresiones armadas que se suscitaron sin que las autoridades reaccionaran de la más mínima manera.
Se cree que esta situación permanecerá mientras los cárteles no logren apropiarse de la plaza o mientras las autoridades se sigan negando a actuar.