Representando uno de los problemas sociales al que menos se le da seguimiento, el apartado de lugares para estacionar por parte de lavacoches sigue presente en la capital potosina, sobre todo en lugares concurridos como el Centro Histórico, la Alameda Central y las inmediaciones del Santuario de la Virgen de Guadalupe o basílica.
En esta última zona mencionada, los lavacoches se han adueñado de gran parte de la avenida Juárez, calles aledañas e incluso otras más un poco más retiradas del recinto religioso, afectando, incluso, a las personas que asisten a la Unidad Administrativa Municipal (UAM) que tienen que dejar su automóvil cerca del santuario guadalupano al no haber encontrado un lugar de estacionamiento más cerca.
La molestia de las personas es porque los lavacoches solo facilitan el lugar si acceden a un lavado o, al menos, a «echarle un ojito», en caso contrario le piden al automovilista que se retire a buscar a otro lado, ya que esos espacios son «exclusivos para los que sí quieren que les laven el coche».
En este sentido, los afectados han requerido la presencia de autoridades municipales para que pongan orden en la zona, sin embargo, hasta el momento no ha existido una postura o plan que termine con esta molestia ciudadana.
