
Resulta muy complicado estudiar la forma y el tamaño exacto de nuestro universo, algo tan grande y complejo como lo es la galaxia y la vida misma no es algo que se pueda medir simplemente con una regla y esperar que nunca cambie, recordemos que hasta este momento se cree que el universo está en constante expansión, que siempre está creciendo y que nunca se mantiene inmóvil.
Durante los últimos años la astronomía moderna ha puesto sobre la mesa lo que se considera la forma más cercana que podría tener nuestra galaxia, la cual consiste en una galaxia de forma de espiral con un núcleo en su interior y cuatro brazos espirales que se expanden.
Esta afirmación se mantuvo vigente y en consenso por la comunidad científica y astronómica durante algunos años, pero una investigación de científicos chinos apunta a que este consenso puede cambiar. No de una forma abrupta donde cada paradigma que se ha consensuado hasta este momento sea erróneo, los cambios son más sutiles.
El estudio Chino asegura que no tiene cuatro brazos espirales que se extienden desde el centro, sino que tiene la forma de una galaxia común de múltiples brazos. Investigadores de la Academia de Ciencias de China y del Observatorio de la Montaña Púrpura, ubicado en la ciudad de Nanjing, usaron datos astrométricos de alta precisión para rastrear e identificar los brazos espirales de la Vía Láctea.
Con todo, el nuevo estudio propone que la Vía Láctea es una galaxia espiral con múltiples brazos, como ya sabíamos, pero que de la región central surgen dos brazos simétricos, los cuales se van dividiendo en nuevos brazos al alejarse del núcleo galáctico. Estos nuevos brazos tienen diferentes tamaños y entre ellos se incluyen los brazos de Centauro, Sagitario, Carina y el brazo local, en el que se encuentra el sistema solar.
Se ha clasificado a la Vía Láctea dentro del 2% existente de galaxias de brazos espirales múltiples que tienen cuatro brazos espirales que se extienden hasta sus regiones exteriores.
Seguiremos informando.