En el mar de remedios caseros, super alimentos y bebidas saludables, una de las opciones que está haciendo más ruido en las redes sociales por sus amplias cualidades curativas es la «kombucha».
Y no, la kombucha no es ninguna bebida alcohólica, se trata de un preparado fermentado a base de té con azúcar y levaduras, primero se debe hacer el cultivo de bacterias y levaduras; posteriormente ese cultivo es añadido al azúcar y al té y se deja fermentar por un tiempo.
La kombucha se extendió tiene su origen en Asia, desde hace más de 2000 años, así no es nada que hayamos inventado recientemente, ya tiene buen recorrido por el mundo, al inicio era reservada solo para la aristocracia, después tuvo su expansión y reconocimiento mundial cuando esta bebida salvó la vida de un emperador japonés, después se extendió a Europa y a todo el mundo. Permaneció viva gracias a su elaboración casera que las familias llevaban a cabo. Se cedía de generación en generación, que elaboraban su propia bebida para consumo propio.
Gracias a la fermentación tiene propiedades saludables, es rica en vitaminas del grupo B (B1, B2, B3, B6, B9, B12), C, D, E y K; y también contiene enzimas que pueden ayudar en la digestión y el metabolismo; ácidos orgánicos (como el láctico o el acético, que le dan el sabor característico); minerales (hierro, potasio, zinc, manganeso, cobre, calcio y magnesio); probióticos, bacterias beneficiosas para el intestino que pueden mejorar la salud intestinal y el sistema inmunológico; polisacáridos y polifenoles, que actúan como antioxidantes y, por tanto, protegen las células.
Así mismo todos estos enzimas y vitaminas ayudan al cuerpo humano a regularizar el proceso digestivo, desintoxicación y salud inmunológica.
Los probióticos presentes en la kombucha pueden mejorar la salud de la flora intestinal y ayudar a mantener un sistema digestivo saludable, así mismo como los antioxidantes de esta bebida pueden ayudar a combatir los radicales libres y fortalecer el sistema inmunológico y ayudar a la desintoxicación por los enzimas que pueden ayudar al hígado en el proceso de desintoxicación del organismo.
Mejorar la digestión gracias a sus probióticos y enzimas puede favorecer la digestión y aliviar molestias estomacales como la diarrea y el estreñimiento y aumentar los niveles de energía debido a las pequeñas cantidades de cafeína y vitaminas del complejo B.
Seguiremos informando.
