
La diputada Beatriz Benavente señaló que, con la salida del doctor José Narro Robles del tricolor, se revelan muchas de las triquiñuelas de la alta cúpula del PRI por imponer Alejandro Romero Cárdenas, gobernador con licencia de Campeche, para ser el nuevo dirigente del partido. Con esto la renovación de la dirigencia pierde credibilidad, aseguró la legisladora.
Benavente se unió al llamado hecho por varios militantes rebeldes de no votar ese día y no ser parte de una simulación, a menos que “El Alito” se regrese a su Estado a gobernar y deje el paso a alguien que sí quiera un cambio en el Revolucionario Institucional.
Un cambio profundo es lo que le hace falta al partido, señaló la legisladora, y se necesitaba una sacudida fuerte como lo fue las elecciones del 2018 donde quedaron como la tercera fuerza política en México y una minoría en el Poder Legislativo federal y en muchos de los congresos locales, así como perdieron todas las gubernaturas y muchas de las alcaldías en las que competían.
La salida de alguien como el doctor Narro es una “gran pérdida ya que es una persona de gran probidad y trayectoria. Un perfil como el de él es lo que necesita el PRI”, señaló Beatriz Benavente. Agregó que eso es lo que necesita el partido para recuperar la confianza de los mexicanos.