Layane Días, una joven brasileña de 20 años que como otras, tenía la inquietud de vivir al máximo su vida. Decidió realizarse un piercing en la nariz, sin imaginar lo que estaba a punto de sucederle. Tras pasar varios días del hecho, lo que parecía una pequeña infección de solo un poco de dolor e irritación, pasó a un dolor incontrolable y pérdida de la movilidad de las piernas.
La joven contó a BBC Mundo que rápidamente fue al hospital: “El médico me preguntó si había tenido alguna herida en la nariz o algo similar, debido a que tenía una bacteria que suele generarse en las fosas nasales. Fue en ese momento que le conté que me había hecho un piercing casi un mes anterior”, con tristeza narró.
Tras una serie de estudios para conocer el diagnóstico exacto de su pérdida de movilidad y dolor, el resultado de una resonancia magnética arrojó el veredícto: la joven tenía una gran cantidad de pus entre las vértebras, lo cual presionaba la médula espinal y por ello limitaba la movilidad.
De inmediato fue intervenida quirúrgicamente para retirar el líquido, suceso que detuvo la progresión de la paraplejia e infección. Oswaldo Reibeiro Márquez, cirujano que atendió el caso, le explicó que de haberse tardado más tiempo, la infección podía haberle causado una sepsis generalizada y muy probablemente la muerte.
Tras dos meses de dolorosa recuperación y con un diagnóstico desconocido de si volverá a caminar o no, la joven recién egresada de la universidad se encuentra retomando poco a poco su vida y aprendiendo a vivir con una silla de ruedas. Layane ha compartido su historia en sus redes sociales, lo que la ha llevado a ganar numerosas cantidades de seguidores, quienes día a día le escriben para alentarla en su proceso de vida. La chica ha explicado que el objetivo de sus cuentas en la web, no son para espantar sobre los piercings, sino para crear conciencia de lo importante que es hacer las cosas con cuidado.
Con información de : Hola!.
