De calles alegres por la música de la tambora y el repicar de las campanas, en Jerez de García Salinas siempre hay fiesta. Sus edificios neoclásicos son testigos de las historias que se han tejido desde su fundación. Esta tierra estuvo protegida por el político Francisco García Salinas e inspiró bellos versos del poeta Ramón López Velarde.
El maravilloso poblado de Jerez, se encuentra en Zacatecas, a 57 km de la capital, situada en un valle largo y casi plano, que es la boca de entrada al Cañón de Tlaltenango. Este destino de clima seco y templado es ideal para el viajero que busca relajarse en un desenfadado ambiente provinciano de vivas tradiciones, magníficas artesanías y encanto natural.
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La riqueza musical de México le debe mucho a la comunidad jerezana de El Cargadero, pues fue ahí es donde se fusionaron estilos musicales prehispánicos con sones e instrumentos de otras latitudes para crearse el famoso «tamborazo zacatecano», que dio lugar a las famosas bandas cuyo estilo se extendió por todo el país.
Lo típico
Don Justo García hace arracadas de oro y plata de filigrana, según la tradicional técnica de un legendario platero español. En todo el centro encontrarás joyerías, muchas de ellas de la familia García.
La talabartería es otra artesanía famosa de la región. Para los bordados utilizan la fibra de pita extraída del maguey, perfecta para los diseños en piel. En la Talabartería Corral y en la Talabartería Gordiano hacen cinturones, sillas de montar, sombreros, bolsas de mano, carteras, huaraches, lazos y diversos artículos de charrería.
En el Mercado de Artesanías hay artículos de madera tallada, cerámica pintada, juguetes artesanales, ollas, cazuelas, jarrones, huaraches, morrales bordados, sarapes y jorongos. También hay una variedad de dulces como cocadas, queso de tuna, dulces de leche, membrillo y calabaza en dulce.
Gastronomía
Jerez se distingue por su exquisita gastronomía, algunos platillos únicos de la región. Se tiene el Asado de Boda Jerezano, Birria, Barbacoa, Chorizo Jerezano, Lengua Rellena de vino de Jerez, además cocadas, perones en almíbar, ates de manzana, membrillo, dulces de biznaga, el camote de leche y claro no pueden faltar las peculiares tostadas y tosticarnes jerezanas, así como los ya tradicionales burritos de la palma y las nieves y raspanieves.
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