Junto con el nitrógeno y el potasio, el fósforo es un elemento esencial para la agricultura, es un recurso mineral escaso en México, por lo que el IPICYT busca desarrollar una tecnología que ayude a recuperarlo y pueda representar una opción para el sector que lo usa para producir alimentos.
Así lo indicó el Investigador de la División de Ciencias Ambientales, César Nieto Delgado, quien indicó que junto a colaboradores de la división buscan diseñar un proceso que permita recuperarlo de afluentes con fósforo a baja concentración, como lo son las aguas residuales municipales tratadas.
“Es uno de los principales componentes de los fertilizantes para producir alimento cerca del 90% del fósforo utilizado a nivel mundial es usado como fertilizante, y por lo tanto es esencial para la seguridad alimentaria a nivel mundial. El problema es que este mineral en México es escaso. Hay yacimientos importantes de roca fosfórica solo en Marruecos, China y Estados Unidos, nuestro país tiene que importarlo”, agrega Nieto Delgado.
El Investigador del IPICYT dio a conocer que el fósforo no desaparece después de utilizarlo, se va en la basura o en los desechos humanos y termina en aguas residuales municipales.
El especialista en Química Ambiental explica que una fracción importante del fósforo utilizado, termina en las aguas residuales municipales, cuya concentración en el agua tratada puede llegar a ser hasta de 5 mg de fósforo por litro., y el objetivo es buscar su recuperación para que sea reusado.
“Buscamos generar una tecnología para reintegrar ese fósforo a la cadena alimenticia, intentamos diseñar un sistema sencillo en el que se recupere fácilmente el fósforo residual en el agua tratada, precipitarlo químicamente (formar un sólido), y ya sólido es materia prima para generar fertilizantes base fósforo o para aplicación directa en agricultura”, agrega el Investigador de la División de Ciencias Ambientales.
La tecnología consiste en el desarrollo de un material base de carbonatos metálicos, los cuales reaccionen a pequeñas cantidades de fósforo que existe en el agua residual municipal tratada, y precipite algún mineral de fósforo.
“En el municipio de SLP se procesan en plantas de tratamiento cerca de 2 mil litros de agua residuales municipales (aguas negras) por segundo. Suponiendo que es posible recuperar 2.5 mg de fósforo por cada litro de agua tratada, en un año se generaría lo equivalente a 1,200 toneladas de roca fosfórica. Ya hemos realizado pruebas de concepto a escala laboratorio, y pronto evaluaremos el sistema a escala semi-piloto y el paso seguir es montar la planta piloto, a partir de ello podemos hablar de la posibilidad de desarrollar la transferencia tecnológica”, explica César Nieto Delgado.
Respecto a los posibles destinatarios de esta tecnología que desarrolla el IPICYT, el Investigador indica que unas son las plantas tratadoras y otros son las empresas que se dedican a la producción de fertilizantes.