A la intemperie, pese a las bajas temperaturas, y entre basura, a pesar del riesgo que implican las condiciones insalubres a las que someten a los pacientes, es como la Unidad de Medicina Familiar Número 49 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) está atendiendo a los potosinos, tema que ha causado indignación y molestia entre los derechohabientes que, además, deben soportar los malos tratos y los comentarios despectivos del personal.
Según denuncian los afectados, desde hace días, quienes acuden por algún tipo de atención o servicio a esta clínica, ubicada en Camino Antiguo a Españita y calle Comanjilla, en la colonia Satélite, han tenido que soportar largas esperas en el patio, a la intemperie y expuestos a las bajas temperaturas que se han desprendido de la temporada invernal ya que, por alguna razón que desconocen, la sala de espera no está habilitada para los pacientes. Lo mismo pasa para niños que para adultos mayores, todos están obligados a esperar su turno en el patio donde las temperaturas suelen ser por demás agresivas.
Tal como se puede confirmar en un video que difunden los mismos derechohabientes, los médicos salen y atienden a los pacientes en pleno pasillo o en el patio donde los obligan a despojarse de sus prendas para poder revisarlos, situación que los deja todavía más expuestos a alguna enfermedad respiratoria. En las imágenes que circulan en redes sociales se ve cómo un médico revisa a un menor de edad mientras que fuertes ráfagas de viento helado los azotan en repetidas ocasiones.
Por su fuera poco, las condiciones de higiene en que se encuentra esta clínica del IMSS son deplorables pues en las mismas imágenes que circulan se observan montones de basura, desechos médicos y prendas usadas apiladas, situación que representa un peligro todavía mayor para la derechohabiencia que queda vulnerable a contraer todo tipo de enfermedades en un lugar que debería ser ejemplo de limpieza y sanidad.
Ante esta situación, los potosinos demandan la inmediata intervención de las autoridades del IMSS a fin de que atiendan el problema y garanticen la atención adecuada para los derechohabientes, sobre todo para niños y adultos mayores que acuden regularmente en busca de un servicio médico de calidad y se topan con condiciones insalubres y de peligro para su bienestar.
