La tecnología que puede “leer la mente”, fue nombrada como un decodificador semántico por qué no trabaja con predecir las palabras a través de la observación de los movimientos de la boza, más bien su trabajo se desempeña en el ámbito mental.
Este decodificador semántico es capaz de descifrar los pensamientos de las personas y convertirlos en texto antes de que los cibernautas puedan si quiera decirlo en voz alta.
Es la primera vez que la inteligencia artificial es capaz de acercarse peligrosamente a desarrollar y entender los pensamientos de las personas antes de que hablen, por eso se dice que el decodificador semántico es la inteligencia artificial que puede leer la mente.
Y aunque demostró poder identificar los pensamientos de las personas asignadas a pruebas, no puedo leer o interpretar los pensamientos de personas ajenas al experimento, por lo que no puede leer cualquier pensamiento a voluntad.
Aunque los avances en inteligencia artificial traigan emoción y esperanza para algunos sectores, los expertos recomiendan que no se debe dar licencia libre al uso de estas nuevas tecnologías, ya que podrían vulnerar el bienestar humano e individual.