En medio de la próxima elección del nuevo secretario general del Comité Ejecutivo Estatal de Morena en San Luis Potosí, se desató una controversia tras denuncias de amenazas y presiones hacia los consejeros por parte de Guillermo Morales, delegado del Bienestar en el estado. Morales ha sido señalado por intentar imponer a José Grimaldo López como su sucesor, alegando órdenes directas de la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez.
Según miembros del partido, Morales presiona a los consejeros para votar por Grimaldo, asegurando que cuenta con el respaldo de la Secretaría de Gobernación. Sin embargo, morenistas locales han expresado su preocupación, sugiriendo que Grimaldo mantiene acuerdos financieros con Morales, especialmente relacionados con el programa «La Clínica es Nuestra» del IMSS Bienestar, lo que explicaría el interés en su designación.
El Consejo Estatal de Morena en San Luis Potosí tenía previsto ratificar un perfil preelecto para el cargo de secretario general, pero ante la falta de consenso, la decisión se llevará finalmente a una votación abierta. Este proceso tendrá lugar el sábado 9 de noviembre, cuando los consejeros seleccionarán al nuevo secretario general del Comité Ejecutivo Estatal.
Para postularse, los candidatos deberán cumplir con ciertos requisitos, como no ocupar actualmente un cargo público ni formar parte del Comité Ejecutivo Estatal, a menos que presenten su renuncia. Con estas restricciones, Morena busca garantizar que el proceso sea transparente y que los perfiles seleccionados se dediquen plenamente a las tareas del partido.