El Papa Francisco, de 88 años, ha sido hospitalizado en el Policlínico Gemelli de Roma debido a una bronquitis persistente que ha derivado en una infección en las vías respiratorias y una leve fiebre, informó el Vaticano este viernes. Tras someterse a análisis médicos, inició un tratamiento farmacológico hospitalario.
A pesar de su estado de salud, el sumo pontífice se encuentra de buen ánimo y ha podido leer algunos periódicos, según informó el portavoz del Vaticano, Matteo Bruni. No obstante, ha cancelado todas sus audiencias y actividades programadas hasta el lunes, incluyendo su participación en el Jubileo de los Artistas y su visita a los estudios de Cinecittà.
Francisco ya había mencionado que padecía un “fuerte resfriado” a principios de febrero, y en días recientes trasladó sus audiencias a su residencia en Casa Santa Marta para evitar esfuerzos adicionales. Esta es la cuarta vez que el Papa es hospitalizado en el Gemelli.
El pontífice ha enfrentado diversos problemas de salud en los últimos años, incluyendo episodios previos de gripe y bronquitis que lo han llevado a cancelar eventos importantes, como su viaje a Dubái en noviembre de 2023. Además, sufre una afección en la rodilla que lo obliga a utilizar bastón y silla de ruedas, aunque ha descartado someterse a cirugía debido a complicaciones con la anestesia general.
Por ahora, el Vaticano ha asegurado que la condición del Papa es estable, aunque se mantendrá bajo observación médica mientras recibe tratamiento.
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