La eterna pregunta sobre si el orden de nacimiento influye en la inteligencia y el éxito académico ha sido objeto de numerosos estudios a lo largo de los años. Sin embargo, una investigación a gran escala realizada por psicólogos de la Universidad de Illinois podría arrojar luz sobre este controvertido tema.
El estudio, publicado en el Journal of Human Resources, examinó a 377 mil estudiantes universitarios para determinar si el orden de nacimiento tiene un impacto significativo en la inteligencia y la personalidad. Contrario a algunas creencias previas, los resultados sugieren que las diferencias entre hermanos primogénitos y menores son tan pequeñas que carecen de relevancia práctica en la vida de las personas.
Aunque se han encontrado diferencias sutiles en el coeficiente intelectual y en ciertos rasgos de personalidad entre los hermanos mayores y los menores, los investigadores aseguran que estas discrepancias son mínimas. Brent Roberts, profesor de Psicología y líder del estudio, enfatizó que, si bien se observan algunas variaciones entre los hijos en función de su orden de nacimiento, la magnitud de estas diferencias es «minúscula».
La investigadora Rodica Damian, quien participó en el estudio, afirmó que los resultados indican que el orden de nacimiento no debería influir en la crianza de los hijos, ya que no está significativamente relacionado con la personalidad o el coeficiente intelectual de los mismos.
