El gobierno de San Luis Potosí presentó una iniciativa legislativa para endurecer las sanciones contra las personas responsables de incendios forestales. La propuesta plantea penas de hasta 10 años de cárcel para quienes generen incendios intencionales que resulten en la destrucción de grandes extensiones de vegetación, así como daños significativos a la propiedad o al ecosistema.
Además, la medida contempla penas menores, de hasta cinco años de prisión, para casos en los que el incendio se origine de manera involuntaria pero cause daños importantes. Con este proyecto, el gobierno estatal busca abordar de raíz un problema que afecta a las cuatro regiones del estado y que, en temporadas críticas, pone en riesgo tanto la biodiversidad como la seguridad de las comunidades rurales.
El gobernador destacó que la iniciativa será entregada esta semana al Congreso del Estado para su análisis y eventual aprobación. La intención es reducir el número de incendios y las hectáreas afectadas cada año mediante un marco legal más riguroso y sanciones disuasorias.
La propuesta llega en un contexto en el que, según las autoridades, la mayoría de los incendios registrados en zonas como la Huasteca y la zona Media han sido provocados, lo que subraya la urgencia de implementar medidas contundentes.
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