En la carretera 57, especialmente a la altura del CREE, ha aumentado la presencia de «montachoques», conductores que provocan accidentes de manera intencional para extorsionar a las víctimas. Estos individuos eligen a conductores distraídos o vulnerables, se colocan frente a ellos y frenan de manera repentina, lo que provoca un choque.
Tras el impacto, los responsables del accidente bajan del vehículo y exigen dinero, teléfonos celulares o algún otro tipo de compensación para no hacerle daño a la víctima. En muchos casos, no actúan solos, sino que están acompañados de otras personas que rápidamente llegan al lugar para intimidar y presionar a la víctima, generando miedo y obligándola a pagar una cantidad de dinero para «resolver» el incidente.
El caso más reciente fue el de un Renault KWID con placas VDW-873-C, que fue captado bloqueando el paso a un conductor en el mismo tramo de la carretera. Este tipo de extorsión se ha vuelto cada vez más frecuente, y varios ciudadanos han denunciado estos hechos. Las autoridades están alertando a la población a estar atenta y tomar precauciones para evitar ser víctimas de este delito.