No son los tiempos ni es el momento. En un momento determinado, como parte del equipo, estamos para lo que venga. No estoy obsesionado con que quiero ser el sucesor (en el Gobierno del Estado), para nada. No es una ambición; sentenció el diputado federal Ricardo Gallardo Juárez al ser cuestionado sobre los rumores que lo perfilan como el posible sucesor de su hijo, Ricardo Gallardo Cardona, como gobernador de San Luis Potosí.
El exalcalde de la capital y de Soledad de Graciano Sánchez sostuvo que no tiene la ambición ni la obsesión de ser gobernador del Estado y menos ser el sucesor directo de Gallardo Cardona ya que, indicó, por el momento se encuentra concentrado en la encomienda que tiene como diputado federal para trabajar por México y, desde luego, para impulsar, desde San Lázaro, los proyectos que representen un beneficio real, sustancial y tangible para los potosinos.
«Soy disciplinado como integrante de este mismo proyecto» reiteró el fundador del Gallardismo, movimiento que nació en Soledad de Graciano Sánchez y que fue creciendo hasta que, como resultado de las elecciones de 2021, llegó al Gobierno del Estado. En ese sentido, reconoció que ni él mismo dimensionó los alcances que tendría esta fuerza política ya que, en un inicio, se enfrentaron fuertes carencias y complicaciones para poder operar y entregarle buenos resultados a la ciudadanía.
Agregó que, de cara al 2027, será el equipo quien tome una decisión en conjunto para determinar quién será la persona que encabezará las labores correspondientes para buscar la gubernatura, sin embargo, por ahora, cada cual está concentrado en su encomienda y con el objetivo claro de entregarle buenas cuentas a la ciudadanía. «Es un trabajo de equipo y así lo hemos venido manejando, así lo vamos a hacer. Platicamos y se determina quién va a ser» afirmó.
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