La noche del jueves 15 de marzo, el cuerpo de Susana Beatriz, apodada cariñosamente «Betita», fue localizado dentro de una bolsa en una barranca, al costado del Fraccionamiento Lomas del Río Medio 3, en el puerto de Veracruz. La víctima, de 24 años, desapareció el pasado 27 de febrero luego de dejar a su hijo en el kinder y salir de compras, perdiendo toda comunicación con sus familiares y amigos.
Los tatuajes de Susana, que incluían el nombre «Jefferson» en su pecho y un león en uno de sus brazos, permitieron confirmar su identidad a pesar de que su cuerpo se encontraba en avanzado estado de descomposición.
La noticia fue anunciada por la tía de la joven en Facebook, quien agradeció el apoyo recibido durante los 19 días de angustiosa búsqueda y anunció que Susana sería velada en su domicilio. Asimismo, exigió justicia para su sobrina.
Los familiares de «Betita» organizaron protestas en Tarimoya para demandar a las autoridades agilizar la búsqueda y llevar a cabo operativos para encontrarla, además de solicitar acceso a las cámaras de videovigilancia. Sin embargo, una de estas manifestaciones fue interrumpida tras ser víctimas de extorsión, donde el agresor afirmaba tener a la mujer secuestrada y exigía 3,500 pesos para su liberación.
Aunque las autoridades aún no han revelado al culpable, se espera que la fiscalía continúe con la investigación y mantenga contacto con la familia para seguir de cerca este caso de feminicidio que ha conmocionado a la comunidad veracruzana.
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