
Ciudad Valles, S.L.P.- Una tragedia enluto a una familia vallense, luego de que muriera un niño de 4 años al ser atropellado.
La tarde de este miércoles llovió en gran parte de la mancha urbana, en algunas zonas fue una ligera llovizna en otros puntos un tremendo aguacero.
Esto fue un regocijo para la gente, pues el intenso calor que se ha registrado no ha dejado disfrutar los días, para los niños representó una oportunidad perfecta para ir a jugar y bañarse como desde hace mucho tiempo no podían hacerlo en las calles.
Los que debió ser una tarde de diversión y bendiciones por las lluvias, se convirtió en la peor pesadilla para una familia. Representó la perdida de un ser querido, un pequeño que comenzaba a vivir sus días, un trágico accidente le quito la vida al pequeño Leonel de 4 años, vecino de la colonia Las Aguilas.
La gente aún no se explica como sucedieron los hechos, diversas versiones se tienen de los sucedido, la única y lamentable realidad es que un menor de 4 años falleció.
La lluvia comenzó al caer la tarde, muchos vieron la oportunidad de que el tiempo se refrescará, otros de poder dormir con el fresco que dejaría la noche, la realidad es que fue una lluvia que al terminar conmocionaría a la ciudad entera, enlutaría un hogar vallense, y dejaría una trágica historia.
El pequeño Leonel de 4 años, se regocijo con los vientos frescos que anunciaban la lluvia, disfruto de esos momentos para después ver con alegría y emoción que comenzaba a llover, presuroso salió de su hogar, enclavado en las calles Juan Sarabia y Ricardo Flores Magón, en la colonia popular Las Águilas.
Ahí las calles son un suplicio no están pavimentadas y los baches salen a relucir tras la lluvia, es una zona donde no se puede correr en automóvil y para cualquier persona representaría un reto transitarla durante un aguacero.
Leonel como todos los niños, había pasado un año solo, jugando y recorriendo una y otra vez el lugar donde vivía, por el confinamiento originado por la pandemia el pequeño poco salía a las calles, si no era acompañado por sus padres.
Pero hoy fue diferente, la emoción de saber que podía salir a jugar en el agua lo lleno de júbilo, sentimiento que después se transformó en llanto y gritos de dolor; cuando se disponía a disfrutar de la tarde lluviosa de verano, fue embestido por un automóvil.
Eunice H. vecina del fraccionamiento Jardines del Campestre, conducía un vehículo marca Dodge Avenger color blanco, de procedencia extranjera. Se dirigió a la zona a realizar unos pendientes, pero la lluvia le jugaría una mala pasada y por la dificultad que el aguacero provocaba para ver los enormes baches, un descuido fue fatal.
Ella refirió que al llegar a la mencionada intersección, se le atravesó el niño de nombre Leonel, pero como fue muy repentinamente no alcanzó a detenerse y lo atropelló.
Los gritos ensordecedores de una madre cimbraron la tarde lluviosa, su hijo estaba tirado a media calle inconsciente, uno de sus familiares como pudo tomó en sus brazos el cuerpo del pequeño Leonel, y abordó un carro particular que se ofreció a llevarlos a la cínica más cercana, a los pocos minutos el corazón de la familia se quebró y desmorono, Leonel de apenas 4 años había fallecido.
La conductora fue retenida en el lugar por vecinos de la zona, al sitio arribó la Cruz Roja y la Policía Municipal, los primeros se retiraron a los pocos minutos tras ayudar a controlar la crisis nerviosa que sufrió la conductora de la unidad.