¿Cuántas veces se habrá intentado darle el rango de municipio a la delegación de Villa de Pozos? La historia destaca varias de ellas y en todos los intentos hay una constante que va más allá de la intención; el fracaso. Todos los que concibieron a Pozos como un nuevo municipio tuvieron que lidiar con la frustración que les representó la derrota jurídica, legislativa o administrativa, porque en muchos rubros es que se tuvieron derrotas.
En mayo de 2022, el gobernador Ricardo Gallardo Cardona le echó leña a la hoguera y revivió el plan de municipalizar Villa de Pozos confiado en la mayoría que había conseguido en el Congreso del Estado y en un grupo de ciudadanos que, de inmediato, se dieron su apoyo, pero las cosas no avanzaron tan fácil como se hubiera pensado. Primero, los diputados le echaron harta hueva y cuando se dieron cuenta ya tenían el tiempo en contra.
Tan apresurados se vieron que tuvieron que cambiar la ley para darse más tiempo y ni así lo lograron. Atendieron los trámites, desarrollaron el plebiscito, lo ganaron de una forma ridícula y siguieron avanzando hasta que un amparo los frenó. Qué coraje. Al final, el esfuerzo fue insuficiente y Pozos no tuvo la categoría necesaria para que, en las elecciones del pasado 2 de junio, se pudiera elegir a su primer alcalde.
La maldición resurgió; lo mismo que le pasó a Fernando Silva Nieto le estaba pasando a Ricardo Gallardo; el proceso bonito, pero lento, aunque desaseado y pervertido en el fondo. El resultado; un fracaso rotundo en el intento de municipalización.
La ventaja que se tiene en el 2024 es que, ahora, los diputados tuvieron que aguantar vara y ponerse a trabajar, a combatir los amparos y entregarle buenas cuentas a la gente y al patrón. Así, este 22 de julio, finalmente cumplieron con su encomienda y rompieron la maldición. Cierto es que aún faltan algunos temas, pero esta vez, parece que sí se llegó a la meta con 21 votos a favor, una abstención y la ausencia conveniente de cinco diputados.
Ahora viene lo bueno; definir a las autoridades y echar a andar un municipio que, por capricho o por demanda ciudadana, está naciendo. Villa de Pozos es ya el municipio 59 de San Luis Potosí.
Cavilaciones:
Primera: Leonardo Francisco Muñoz Pérez, delegado del IMSS en San Luis Potosí, dejará el cargo de un momento a otro. El señor tiene serios señalamientos por corrupción, agandalle y malos manejos de los recursos humanos, materiales y financieros del instituto o lo que es lo mismo, no se va; lo corren ¡Miau!
Segunda: Cuentan que el presidente municipal electo de Huehutlan, a lo descarado, pedía a los reporteros ir a “arreglarse con los malos” para la publicidad durante su campaña. Ahora, ya les dijo que se alinean o se alinean, porque no quiere más que puras notas buenas ¡Uy, uy, uy!
Tercera: La ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Lenia Batres, está hoy en San Luis Potosí hablando de la Reforma Judicial en un evento que se realizará en la Facultad de Derecho. La expectativa es buena, esperemos que haga algo mejor que los fontaneros legisladores Juan Ramiro Robledo y Ricardo Monreal. Muuuu, muuu, muuu…
