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En cuestión de semanas, el Congreso del Estado tendrá que elegir a la persona que quedará al frente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y la contienda no puede estar más pervertida, no por todos los candidatos, sino por algunos infiltrados que lograron colarse a la convocatoria y que, ahora, quieres desvirtuar el proceso o buscar algún beneficio personal, tal como lo han venido haciendo desde hace varios años, tiempo en el que la defensa de las garantías individuales es lo que menos les ha importado. Curiosamente, cuando se trata de pelear el huesito, todos dicen tener el más firme compromiso.
En el proceso de selección hay de todo; hombres, mujeres y personas no binarias, hay activistas de amplia trayectoria, vividores y mercenarios que han encontrado en este tipo de cargos la oportunidad de sangrar al erario con la excusa de que abanderan las causas de diversos sectores sociales, pero esa es una vil mentira, son muy pocos quienes realmente tienen la convicción y las ganas de trabajar.
La lista menciona a 18 aspirantes para la Presidencia de la CEDH, entre ellos aparece la actual presidenta, Giovanna Iztel Argüelles Moreno, quien está buscando la reelección luego de un trabajo que, para muchos, fue bueno, pero para otros deja muchos pendientes. En contraparte, hay nombres que pueden ser objetables con facilidad como el polémico y vividor Ignacio Rafael Acosta Díaz de León, Javier López Rodríguez quien sigue siendo ampliamente relacionado con el excalcalde capitalino Xavier Nava, y Pablo Loredo Oyarvidez, quien en 2019, renunció a la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes dejando tremendo cochinero.
Hay muy buena activistas también como Catalina Torres y Diana Carolina Santiago, o destacados profesionistas como Elizabeth Jalomo de León y Enrique Rivera Sierra ¡Vamos! El Congreso del Estado tiene para escoger, también me atrevería a creer que el nombramiento será un tema político. Si es así, de mínimo, elijan al mejorcito.
Por cierto, quien llegue, tendrá que hacer frente al grupo de pseudovíctimas que ya también agarrado de modus vivendi el golpeteo, las acusaciones sin sentido y los dramas. Diosito los agarre confesados.
Cavilaciones:
Primera: En la Secretaría de Seguridad se alistan para el relevo del titular, José Luis Ruiz Contreras. El funcionario busca ser magistrado del Poder Judicial, tendría que retirarse del cargo para hacer campaña. La elección se efectuará el 1 de junio. Hay, por lo menos, tres tiradores. Les dejo los nombres de tarea.
Segunda: Para el 8M, se preparan movilizaciones de grupos feministas. Como cada año, se advierte un clima de alta tensión, no obstante, las autoridades han decidido evitar la presencia de cuerpos de seguridad en las rutas que seguirán los contingentes.
Tercera: El sistema Nacional de Seguridad, vía la Guardia Nacional, podrá tener acceso a la información financiera, datos biométricos, hipotecarios, bancarios, educativos, teléfonos celulares, CURP… bueno, hasta actas de defunción. Se trata de una intentona que nos regresaría a la oscura época del 68 ¡Ni Dios lo mande! ¡Miau!