La reunión del Consejo Estatal del Partido Acción Nacional, celebrada el pasado sábado, dejó en claro que el ego y las intrigas pueden, en algunas personas, más que la lealtad y la gratitud. El enfrentamiento abierto entre la dirigente Verónica Rodríguez y el grupo que le dio nombre y cargos públicos, el mismo que la hizo presidenta del partido, por fin vio la luz en una especie de aborto anunciado.
Xavier Azuara debe estar pagando algún karma, porque la mayoría de los hombres y mujeres que empodera, lo traicionan. Verónica no fue la excepción, no pudo con la presión de grupos y personajes que le exigían romper con su progenitor político porque la quieren para ellos, para manipularla, exigirle posiciones, candidaturas y, después, desecharla.
Fue la propia dirigente quien vivió en carne propia los yerros de la traición de Juan Francisco Aguilar al grupo y, cosas de la vida, ahora ella es la protagonista de una traición justificada en un discurso donde se autodefine como esclava de la gratitud, en un discurso lamentable, porque la gratitud no puede ser jamás una esclavitud, excepto para los mediocres. Curiosamente, no se sintió esclava cuando fue electa regidora, tampoco cuando los xavieristas soportaron todo tipo de presiones para que llegara a la presidencia.
Sea como sea, la traición se venía manejando en reproches pueriles por parte de Rodríguez y lamentos de la militancia porque no fluye un programa político, mucho menos recursos, tampoco formación de cuadros y sí, la dirigente se desbocó ante su propio Consejo para liberarse, según ella, de las cadenas políticas que llevaron a la hija de un albañil a soñar en grande, gracias al trabajo de años de un grupo encabezado por el diputado Azuara Zúñiga.
Rodríguez Hernández podrá estar muy contenta por su acto de liberación política, por su valor para romper con Azuara y convertirse, ahora sí, en esclava de los grupos de caníbales políticos que le mostrarán la razón por la que la querían lejos del legislador. Suerte en su nueva esclavitud.
La gratitud, dice Lao Tsé, es la memoria del corazón.
Cavilaciones:
Primera: La Guardia Nacional debe poner atención en la carretera 57, tramo El Huizache-Matehuala, donde este fin de semana reaparecieron los asaltantes de camionetas de turistas. Apenas comienza diciembre y nadie en San Luis Potosí quiere otro escándalo de abuso, extorsión y secuestro, menos en perjuicio de los paisanos que regresan a pasar las fiestas de fin de año con su familia.
Segunda: El equipo del cantante Luis Miguel no responde chipote con sangre, sea chico o sea grande, han causado severos destrozos en el Centro de Alto rendimiento, antes estadio Plan de San Luis, donde, este lunes, se llevará a cabo el concierto de su Tour 2023. El Gato Filósofo desea de todo corazón que todo salga bien.
Tercera: Para el martes, tenemos partido de semifinal del torneo mexicano de futbol. Los precios de los boletos van de mil 700 a tres mil 689 más costo por servicio si lo compran vía electrónica. Atlético de San Luis ha llegado lejos en este torneo y los empresarios quieren aprovechar.