Dicen que, en política, no hay coincidencias y, ante ese escenario, llama mucho la atención que el mismo día que se presentan las nuevas rutas del MetroRed también se concrete la detención del exdiputado panista Rolando Hervert Lara por su presunta responsabilidad en el desvío de recursos que, hace varios años, se destinaron para el fallido proyecto de la RedMetro, aquel que Juan Manuel Carreras inauguró pese a tener enormes deficiencias y no contar con los vehículos ni con las condiciones adecuadas para su funcionamiento, aquel por el que Leopoldo Stevens Amaro, extitular de SEDUVOP, enfrenta prisión domiciliara.
La RedMetro es una cloaca enorme; primero fue el MetroBus, luego le cambiaron el nombre y, el 26 marzo de 2019, conformaron un organismo público descentralizado para que lo administrara, la Red Metropolitana de Transporte, pero nada funcionó porque faltaba lo más importante; el dinero. Por desgracia, ese ya se encontraba en los bolsillos de varios funcionarios y, por lo visto, de diputados también.
El 2 de septiembre de 2022, sorprendió la noticia de que Leopoldo Stevens Amaro había sido detenido por agentes de la Fiscalía y que los delitos que se le imputaban, justamente, se relacionaban con la RedMetro. Su edad lo salvó de terminar en el penal de La Pila, pero no logró evadir la prisión domiciliaria mientras se realizan las investigaciones pertinentes. De manera preliminar, se manejaba un daño al erario público por más de 180 millones de pesos, aunque se cree que fue mucho mayor.
La relación que, presuntamente, tiene Rolando Hervert con este caso sorprende, pero no tanto. Cuando fue diputado se le relacionó con una larga lista de casos de nepotismo y corrupción como el agandalle de bases en el Congreso del Estado para sus amigos, desvío de recursos y el uso inadecuado de su calidad de legislador para favorecerse en diversos negocios, ahora se sabe que también usaba esa condición para adjudicarse obras públicas.
Lo cierto es que esta conducta, criminal sin duda, no es nueva y el caso de la RedMetro no es el único. Desde 2020, Rolando era investigado por autoridades del Estado de México al existir una denuncia en su contra por la presunta comisión de delitos como fraude y daño de los bienes, ello, en perjuicio de un particular originario de Tlalnepantla. La denuncia, pese a toda la evidencia aportada, está congelada.
Por el daño causado a los potosinos por el desvío de la RedMetro, se esperaría que las autoridades se apliquen y… ni modo, que topen chivas y chillen llantas.
Cavilaciones:
Primera: En la Huasteca, hay un dolor muy profundo contra la candidata de Morena al Senado de la República, Rita Ozalia Rodríguez. Resulta que la doña no paga la luz, nunca la pagó y, hace unas semanas, cuando fueron a cortarle el servicio, se puso fúrica. Juró venganza y sí, días después, una docena de trabajadores de la CFE fueron despedidos. El Gato Filósofo indaga las denuncias que presentaron los afectados.
Segunda: En Matlapa, hubo un lío hace unos días donde salieron a relucir armas de fuego. Un exalcalde de nombre César Torres está en el centro de la controversia. Alguien debe atender los brotes de violencia en la región huasteca.
Tercera: Parece que no, pero el CEEPAC tiene bien monitoreados a los candidatos a alcaldes que hacen campaña en reuniones disfrazadas de desayunos de amigos y esas cosas. No se quejen después si hay sanciones.