Como en los mejores tiempos del PRI, Morena tiene una estrategia para asegurar el triunfo de sus candidatos el próximo 2 de junio; se trata del conocido y famosísimo carrusel.
Entre los morenistas circula una hoja de ruta en la que se explica con claridad la manera de operar en la compra de votos. Así, pruebas en mano, se entregará el pago correspondiente que va de los 500 pesos por cada sufragio hasta los cinco mil para los coordinadores de grupo que deben encargarse de garantizar al menos 11 votos.
El documento que circula tiene una advertencia muy clara: «Documento estrictamente confidencial» muy inocente de parte de los morenos pensar que esas instrucciones van a quedar en la confidencialidad considerando el número de personas al que debe llegar.
Morena ahora solo tiene una opción; igual que los infieles, negarlo todo, aunque los encuentren con los calzones en la mano.
Lo cierto es que la hora de la verdad se acerca y que todos los partidos y candidatos alistan su resto para buscar obtener el triunfo. Amarres de última hora y operación el día «D» son la clave. Lo demás, es lo de menos.
Cavilaciones:
Primera: En Ciudad Valles, David Medina se consolida como el puntero en las encuestas para ganar la elección de presidente municipal. El trabajo que realizó durante su primer periodo le ha ganado la confianza de los ciudadanos de la Puerta Grande de la Huasteca.
Segunda: Será por maldad o será de verdad; algunos grupos se han encargado de hacer público el apoyo a algunos candidatos del Verde, pero su rotundo rechazo a otro. De ser así, no se estaría concretando la estrategia de “Los cinco al Verde”. Un voto dividido es lo que se espera para el 2 de junio.
Tercera: Los grupos que, en otro tiempo, tuvieron la facultad de hacer y deshacer a su antojo y que estaban un poco relegados, ya le volvieron a agarrar la medida al Gobierno del Estado. Ya encontraron cómo frenar varios proyectos importantes. Lo que sucede con el Parque de Morales es prueba de ello.