Acoso, discriminación y agresividad es lo que sufren diariamente los estudiantes de la especialidad de Imagenología Diagnóstica y Terapéutica en el Hospital Central por parte del jefe del departamento del mismo nombre, ya que, según denuncian los propios estudiantes, el Dr. Alejandro Hernández Martínez se expresa con insultos, además de amenazas y discriminación a los alumnos residentes.
Muchos estudiantes se han quejado formalmente en contra del jefe de departamento del Hospital Central, ya que son ya muchas las ocasiones en que el Dr. Alejandro Hernández Martínez ha insultado con lujo de groserías a los médicos residentes, entre ellos, destaca el caso de discriminación que un doctor residente con discapacidad auditiva recibió por parte de su superior.
“Y tú, ¿Por qué estás aquí?, ¿Por lástima?, ¿Cómo estudiaste medicina y cómo planeas hacer la residencia si eres sordo? Tú no deberías estar aquí». Fue lo que el grosero doctor le preguntó a un estudiante con discapacidad auditiva en su entrevista de residencia.
En otra ocasión, el doctor, al enterarse que los médicos residentes se quejaron con él, los reunió a todos para amenazarlos, «Van a entender por las malas, hasta donde tope, les voy a hacer la vida imposible, se van a quedar sin rotaciones», afirman los estudiantes sobre la deplorable conducta de este sujeto.
«No me importa, yo me voy a encargar de que te corran de la residencia o te cancelen tu rotación a España», amenazó Hernández Martínez a otro médico residente bajo su cargo.
Además, según las denuncias de los afectados, esta joyita de doctor también provoca a sus subalternos para que cometan los mismos actos despreciables, diciéndoles que castiguen a sus compañeros «por pendejos». «Huevonazos, ves por qué hay que maltratarlos, chíngatelos ahora sí», le dijo a una doctora al observar un error de sus compañeros de menor grado.
Sin embargo, el Dr. Alejandro Hernández Martínez no solo se desquita con sus estudiantes, sino con otras personas, pues su comportamiento ruin llega hasta los pacientes. Según testimonios, en una ocasión, mientras revisaba los resultados de un ultrasonido pélvico realizado a una mujer, su comentario fue «A esta le dieron hasta por donde no».
Otros estudiantes afirman que en alguna ocasión, cuando Hernández Martínez no quiso dar clase, los corrió afirmando «Hoy no tengo ganas de vivir, estoy hasta la chingada, bola de pendejos, déjenme en paz».
Ante este comentario, los estudiantes afirman la impunidad con la que se maneja este despreciable sujeto, pues aunque hay varias quejas en su contra en el mismo Hospital Central, el nosocomio no ha tomado acciones en su contra.
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