El linfoma es una enfermedad neoplásica, es decir, cualquier crecimiento de células o tejidos anormales en el organismo. Es un tipo de cáncer que se origina en las células sanguíneas que se llaman linfocitos, los cuales, ya son maduros y se encuentran en los ganglios linfáticos o en los órganos extra medulares (fuera de la médula ósea).
El Dr. Eduardo Roberto Caballero Lugo, médico hematólogo pediatra, adjunto al Servicio de Pediatría del Hospital Central “Ignacio Morones Prieto”, comenta que el linfoma es la segunda causa de cáncer en las niñas y niños; representa el 11% de todos los cánceres pediátricos, y según estadísticas nacionales en México, el linfoma no Hodgkin constituye el tercer cáncer más común en el sexo masculino y el sexto en el femenino.
De todos los casos de cáncer infantil en el estado de San Luis Potosí, el linfoma representa menos del 10% del número de casos que se atienden en el Hospital Central debido a que no es muy frecuente este tipo de cáncer, actualmente, en activo en esta institución existen dos pacientes pediátricos con linfoma. No existe un factor de riesgo asociado al padecimiento, aunque, se estima que cerca del 60% de los casos se asocia a que el paciente tuvo o tiene una infección por un virus que se llama “Virus de Epstein Barr (VEB)”.
El linfoma es poco común o poco frecuente en menores de 10 años, usualmente afecta más a adolescentes y adultos. Si detectas algunos de los siguientes síntomas es importante que acudas con un médico: crecimiento ganglionar (adenopatías), bolitas que crecen en el cuello, en las axilas y en el abdomen. Crecimiento de los órganos abdominales como el hígado y el bazo. Sudoración nocturna, pérdida de peso, fiebre que dure más de 5 días y en algunos casos se puede presentar tos o dificultad para respirar.
Usualmente la mayoría de los linfomas son altamente curables, especialmente cuando se detectan en los primeros estadíos, de aquí radica la importancia de siempre estar alertas a los síntomas y ante cualquier anomalía acudir con un especialista. Recuerda que la detección temprana y atención oportuna garantizan la remisión de la enfermedad.