San Luis Potosí. – Tras los recientes hechos vividos en Matehuala, el Gobierno del Estado se vio en la necesidad de utilizar los helicópteros a disposición del Estado, sin embargo, se llevaron la desagradable sorpresa de que las aeronaves con las que se cuentan tienen casi 50 años, y ya no pueden usarse para las exigentes tareas de reconocimiento y búsqueda para las que se les necesita.
Ante este hecho, el gobernador del Estado, Ricardo Gallardo Cardona, descubrió que en la pasada administración, Juan Manuel Carreras habría gastado alrededor de 480 millones de pesos en el mantenimiento de una flotilla aérea que debió reemplazarse hace mucho tiempo, pues estos vehículos tienen una vida útil de entre 30 a 40 años.
El despilfarro de Carreras no sólo fue equivocado, sino inútil, pues, según el actual gobernador, los helicópteros seguido se descomponen, y para colmo, no pueden salir a volar después de las 6:00 pm., por lo que se entorpecen las acciones de búsqueda y rescate de heridos o personas perdidas por la noche.
“Es malo lo que hoy tiene el Gobierno, a las 6:00 de la tarde, el aeropuerto no deja salir a las aeronaves del Gobierno de Estado, porque no pueden volar de noche, imagínense qué tonterías”, reprochó Gallardo Cardona
El gobernador puntualizó que la flotilla estatal consta de una avioneta Cessna modelo 1978, a la que se le ha invertido actualmente 18 millones de pesos por mantenimiento, por cuestiones del seguro, aunque solo se utilizó tres veces; el helicóptero blanco BELL 412, es modelo 1974 y fue re ensamblado en 1989, por lo que el cascarón tiene ya casi 50 años; y los dos Eurocopter, de color azul, que no son buenos, debido a que siempre están en reparación o mantenimiento.
Estos modelos causan un gran gasto al erario, pues por ejemplo, el mantenimiento de la Cessna, ascendió a 18 millones para utilizarla tres veces, cuando esas ocasiones se pudo rentar un avión, con un gran ahorro.
“Ya no queremos seguir pagando esas millonadas de mantenimiento con aeronaves viejitas”, sentenció el mandatario.
Para poner fin a esto, se está analizando el subastar las aeronaves, o al fin sacarlas del mercado para que sean adquiridas por algún interesado; el objetivo en esto es lograr que el estado pueda hacerse de modernas y mejores aeronaves que cumplan con los requerimientos y características necesarias para los trabajos de transporte, búsqueda y rescate diurno y nocturno.
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