Un equipo de geólogos chinos ha anunciado el descubrimiento de dos nuevos minerales en el yacimiento de Bayan Obo, ubicado en la región septentrional de Mongolia Interior. La revelación fue hecha pública por la Academia de Ciencias de China, destacando el potencial económico y estratégico de estos hallazgos.
Los minerales recién identificados, denominados oboniobita y scandio-fluoro-eckermannita, son especialmente significativos por contener niobio y escandio. Estos elementos son valorados por su escasez y tienen aplicaciones críticas en sectores como la tecnología de materiales avanzados, la energía renovable, la industria aeroespacial y la defensa.
La scandio-fluoro-eckermannita es particularmente notable por ser el primer mineral descubierto en China que contiene escandio, uno de los elementos de las llamadas tierras raras, cruciales para numerosas tecnologías modernas.
El académico Li Xianhua, citado por la agencia estatal Xinhua, subrayó la importancia estratégica de estos minerales para el desarrollo socioeconómico del país. Además, Li Xiao, director general de Baotou Steel, empresa que participó en la investigación, destacó la riqueza mineral única de Bayan Obo, reconocido como el mayor yacimiento de tierras raras del mundo.
Recientemente, China ha intensificado su control sobre los recursos de tierras raras, publicando una nueva ley que enfatiza la propiedad estatal de estos recursos y establece normas para una minería responsable y sostenible.
Desde 1959, el yacimiento de Bayan Obo ha sido escenario del descubrimiento de 18 nuevos minerales, subrayando su importancia continua para la ciencia y la industria global.
Este último hallazgo reafirma el papel de China como líder mundial en la producción y control de tierras raras, fundamentales para sectores clave de la economía global.
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