En el Estado durante el 2023, se registraron 77 casos de Defectos al Nacimiento, el 50% se agrupa en malformaciones craneofaciales entre las más frecuentes: labio y/o paladar hendido, seguido de micro y macrocefalia.
Las malformaciones congénitas, son la segunda causa de muerte en los niños y niñas menores de 28 días y de menos de 5 años, de acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud. En el mundo, afectan a 1 de cada 33 bebés y causan 3,2 millones de discapacidades al año. Se calcula que cada año 276.000 recién nacidos fallecen durante las primeras cuatro semanas de vida en el mundo debido a anomalías congénitas.
Pueden tener un origen genético, infeccioso o ambiental. Los más frecuentes son las malformaciones cardíacas, los defectos del tubo neural y el síndrome de Down. Muchos de estos defectos se pueden prevenir o tratar. La ingesta suficiente de ácido fólico y yodo durante el embarazo, la vacunación contra la rubéola a las mujeres y los cuidados prenatales adecuados constituyen algunas medidas clave para la prevención.
El estado nutricional de la mujer antes y durante el embarazo ejerce una influencia fundamental en el crecimiento y el desarrollo fetal. Una alimentación deficiente en el periodo previo a la concepción y al comienzo del embarazo hasta las 12 semanas de gestación puede aumentar el riesgo de desenlaces adversos del embarazo. Según la norma NOM-007-SSA2-2016, para la atención de la mujer durante el embarazo, parto y puerperio, y de la persona recién nacida se recomienda prescribir 0.4 mg de ácido fólico y micronutrientes mínimo tres meses previos al embarazo y durante todo el embarazo para prevenir defectos del tubo neural.
En los Servicios de Salud a través de las unidades médicas, se ofrece de manera gratuita ácido fólico a las mujeres durante el embarazo y en edad reproductiva, con énfasis en aquellas que planean embarazarse. Durante el año 2023, se otorgaron 16 mil 659 frascos de ácido fólico a embarazadas y 8 mil 921 a mujeres no embarazadas.