El país que alberga los Juegos Olímpicos se enfrenta a protestas en vísperas de la inauguración del evento deportivo más grande del planeta.
Los manifestantes critican el impago a los trabajadores, las muertes ocurridas durante las obras, y el desvío de fondos federales asignados a la construcción de las infraestructuras olímpicas. Además, existe una fuerte oposición a la participación de las delegaciones de Rusia e Israel, debido a los conflictos en curso en Ucrania y Gaza, respectivamente.
Las autoridades francesas enfrentan el reto de responder a estas demandas mientras los ciudadanos exigen que los Juegos representen un símbolo de igualdad y no de corrupción.
Como cada cuatro años, cada país que alberga la justa olímpica tiene que lidiar con las inconformidades justificadas de sus ciudadanos que aprovechan para mostrar al mundo la realidad de su día a día en casa y, los problemas que afrontan todos los países del mundo.
Seguiremos informando.