En medio de la temporada de vacaciones, cuando millones de personas se aventuran en viajes tanto por placer como por negocios, la salud sigue siendo una prioridad crucial. Especialmente durante los viajes largos, como en avión o automóvil, se deben tomar medidas preventivas para evitar riesgos como la trombosis venosa, también conocida como «trombosis del viajero».
El doctor Moisés Calderón, especialista en cirugía cardiotorácica, advierte sobre los peligros de la trombosis venosa, donde los coágulos sanguíneos pueden formarse en las venas debido a la inactividad prolongada y la deshidratación, factores comunes en los viajes largos. El riesgo aumenta cuando estos coágulos se desprenden y viajan a los pulmones, causando una emergencia médica grave conocida como tromboembolismo pulmonar, potencialmente mortal.
Para prevenir la trombosis venosa, el doctor Calderón enfatiza la importancia de la movilización durante el viaje. Recomienda a los viajeros levantarse y caminar cada dos o tres horas para estimular la circulación sanguínea y evitar la formación de coágulos. Además, es esencial mantenerse bien hidratado, especialmente en ambientes deshidratantes como los aviones.
El especialista también menciona que ciertas condiciones preexistentes, como enfermedades hereditarias o el uso de ciertos medicamentos como los estrógenos, pueden predisponer a las personas a desarrollar trombosis venosa. Es crucial estar atento a los síntomas como dolor repentino, hinchazón o enrojecimiento en una pierna después de un viaje largo.
En caso de experimentar alguno de estos síntomas, el doctor Calderón aconseja buscar atención médica inmediata en lugar de recurrir a la automedicación, que puede ser riesgosa en estos casos. Un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado pueden marcar la diferencia en la salud y la seguridad del viajero.
Ante la temporada de viajes en pleno apogeo, estas recomendaciones se vuelven especialmente relevantes para garantizar unas vacaciones seguras y libres de complicaciones médicas.
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