Ciudad Valles, S.L.P. – Una escena de horror y abandono fue descubierta este martes en la colonia 20 de Noviembre, donde dos cachorros fueron hallados sin vida, mientras que otros dos luchan por sobrevivir en condiciones de extrema desnutrición. La madre de los pequeños, una perrita llamada «Luna», se encuentra presuntamente gravemente herida dentro de una vivienda, sin recibir atención médica.
Vecinos de la zona habían alertado sobre la situación a las autoridades, denunciando que la dueña del domicilio apenas se presentaba una vez por semana y que los perros vivían en condiciones deplorables, sin alimento ni cuidados adecuados. Al atender la denuncia, la Dirección de Ecología, acompañada por elementos de la Policía y Tránsito Municipal, confirmó la tragedia y procedió al rescate de los sobrevivientes.
De acuerdo con testimonios, Luna podría tener una severa lesión en una de sus patas, la cual, de no ser atendida, podría derivar en gangrena. A pesar de que el personal de Ecología intentó llamar a la perrita, no hubo respuesta, lo que refuerza la hipótesis de que su estado de salud es crítico. En el lugar, se observó una pequeña área techada y dos cuartos, donde los animales habrían pasado meses de abandono y sufrimiento.
Ante la urgencia del caso, el director de Ecología, Julio César Otero Torres, presentó formalmente una denuncia ante la Fiscalía General del Estado para solicitar una orden de cateo que permita rescatar a Luna lo antes posible. Se espera que la orden pueda ser emitida este mismo miércoles o en los próximos días, ya que cada minuto cuenta para salvar la vida de la perrita.
El responsable de este acto de crueldad animal podría enfrentar sanciones conforme al Código Penal, incluyendo la reparación del daño, el pago de gastos médicos y la prohibición definitiva de poseer animales en el futuro. Las autoridades han dejado en claro que el maltrato animal no quedará impune, y la sociedad exige justicia para estos inocentes que sufrieron el abandono y la negligencia de su dueña.
Mientras tanto, los sobrevivientes están bajo resguardo de la Dirección de Ecología, esperando una segunda oportunidad en un hogar donde se les brinde el amor y cuidado que siempre les fue negado.
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