Pánico y terror ha causado la presencia de un grupo criminal que opera sobre la carretera 57, en el tramo San Luis Potosí-Matehuala y que ataca, principalmente, a pasajeros y conductores de autobuses que transitan sobre la rúa durante la noche, ello, aprovechando la falta de vigilancia y el completo abandono en que se encuentran las carreteras potosinas pese a las constantes denuncias de transportistas que demandan el fortalecimiento de la seguridad en una de las carreteras más transitadas de todo el país.
De acuerdo con los testimonios que han difundido las propias víctimas, se ha vuelto bastante común que los criminales utilicen una técnica similar a la que aplican los personajes de la saga de «Rápido y furioso»; uno o varios vehículos se posicionan al frente del autobús seleccionado impidiéndole el paso, paulatinamente van frenando hasta que logran pararlo por completo. Una vez detenida la unidad, hombres armados proceden a abordarla para despojar a los pasajeros de todos sus objetos de valor, dinero y demás pertenencias.
Un video difundido a través de redes sociales revela el modus operandi de los delincuentes que, en efecto, parece sacado de una película de acción pues, en forma por demás temeraria, le cierran el paso al autobús que, de acuerdo con los datos de la grabación, en ese preciso instante se desplazaba a más de 100 kilómetros por hora, situación que aumenta el riesgo y la posibilidad de que se registre un accidente con consecuencias mortales, tanto para los criminales como para los pasajeros. La grabación, según se observa, data de este miércoles 1 de diciembre y ocurrió poco después de las 22:30 horas.
Las denuncias precisan que, aunque se suelen utilizar varios vehículos para cometer estos delitos, es más frecuente la participación de un Versa color arena y un Sentra Azul, tripulados por varias personas que llevan consigo armas de distintos calibres que utilizan para someter a los pasajeros y consumar los ataques que se han vuelto comunes entre el libramiento a México y la entrada a Villa Hidalgo.
Automovilistas, choferes de autobuses y transportistas lamentan la poca atención que han puesto las autoridades en la vigilancia de esta carretera, situación que ha permitidos que proliferen los ataques criminales en perjuicio de la población.
