El pequeño pueblo de Creel es el sitio de elección para partir en viaje hacia la zona de Barrancas del Cobre. Ubicado en la Sierra Tarahumara, Creel forma parte del recorrido del ferrocarril Chihuahua-Pacífico.
Creel es un poblado tranquilo y apacible, cuya avenida principal cuenta con numerosas tiendas dedicadas a la venta de artesanías tarahumaras como vasijas de palma, tambores, pulseras y pendientes de metal, arcos, violines, cinturones y rebozos.
El pueblo cuenta con instalaciones hoteleras de varias categorías, restaurantes y empresas dedicadas al turismo en general, y turismo de aventura, donde contratar excursiones hacia las barrancas, cabalgatas, caminatas, ciclismo de montaña, escalada, rappel, ente otras actividades.
A tan solo 5 kilómetros de Creel se localiza San Ignacio de Arareko, comunidad tarahumara que se extiende en una superficie de 20 mil hectáreas de bosque. El centro de la comunidad está asentado en el Valle de Arareko en donde se encuentra la Misión de San Ignacio, sitio de reunión de la comunidad local en los días domingo.
Inicia la aventura desde Chihuahua capital en la famosa Ruta del Chepe, uno de los 10 recorridos en tren más espectaculares del mundo, a lo largo de 653 kilómetros, 37 puentes y 86 túneles entre Chihuahua y los Mochis, Sinaloa, el visitante disfrutará de una experiencia increíble internándose en paisajes sin igual, desde la comodidad de un asiento reclinable, con clima artificial y servicio de alimentos y bebidas a bordo.
Es muy recomendable pasar uno o más días en sitios como Creel, Pueblo Mágico, Divisadero Barrancas, Cerocahui y El Fuerte, destinos más reconocidos por sus actividades al aire libre, con posibilidades de tener contacto con la naturaleza y conocer a los legendarios Rarámuri, miembros de una de las culturas nativas más primitivas de América.