Rocío López, conocida en TikTok como Roro, ha logrado un fenómeno viral con sus elaboradas recetas y su estilo característico, pero su éxito también ha desatado una ola de críticas. Con más de tres millones de seguidores en la plataforma, Roro ha ganado popularidad por sus videos en los que presenta recetas complejas, siempre con un toque personal: cada plato es preparado para su novio, Pablo, cuyo nombre se menciona al inicio de cada video.
El formato de sus videos es distintivo: empieza con una dulce petición de su novio y sigue con una meticulosa elaboración de recetas que a menudo parecen innecesariamente complicadas. Desde preparar su propio queso hasta amasar pan casero, Roro convierte platos simples en elaborados proyectos culinarios. La imagen final de su novio probando el platillo se ha vuelto emblemática, pero también es un punto de discordia.
La figura de Roro ha sido acusada de promover una visión conservadora de la mujer, en contraste con los valores feministas actuales. Críticas de usuarios de redes sociales, políticos y figuras públicas han señalado que su contenido refuerza estereotipos tradicionales y puede percibirse como un regreso a modelos de conducta de épocas pasadas. Las críticas se han intensificado, llegando a insultos en la calle, y acusaciones de falsificación de su voz.
En una reciente entrevista en el podcast Sr. Wolf, Roro ha respondido a las críticas, afirmando que su contenido es guionizado y que la voz en sus videos es auténtica. También ha defendido su postura diciendo que se identifica como feminista, siempre que se entienda como la igualdad de derechos entre hombres y mujeres.
El movimiento detrás de Roro, a menudo comparado con el concepto de «tradwife» o mujer tradicional, ha suscitado un debate sobre el papel de las mujeres en la era moderna y los valores del feminismo contemporáneo. La controversia subraya la tensión entre la nostalgia por roles tradicionales y las demandas actuales de igualdad y empoderamiento femenino.
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