El arzobispo de San Luis, Jesús Carlos Cabrero, aseguró que la Iglesia Católica continúa orando por la vida de todos los enfermos, así como por el personal médico que día con día arriesga la vida en los centros hospitalarios donde se están atendiendo los enfermos de coronavirus. Pidió a las personas sopesar la tormenta manteniendo una mente sana y una actitud saludable, ya que solo así podremos librar esta difícil situación mundial.
Es por lo anterior que el jerarca católico continúa exhortando a los potosinos a no caer en la desesperación, ya que «todo esto pasará para poder comenzar desde donde nos quedamos», dijo. Recordó que solo la fraternidad y la unidad podrá ayudarnos a librar cualquier adversidad, «busquemos estar al servicio del bien común, capaz de poner en el centro la dignidad de cada ser humano».
Así mismo, compartió que la pandemia del coronavirus ha dejado al descubierto nuestra vulnerabilidad, tanto física como moral, ya que «se han presentado muchas situaciones donde se aprecia el egoísmo de las personas, el individualismo y la lejanía de Dios». Jesús Carlos Cabrero manifestó que «la fijación que tienen las nuevas generaciones en la comunicación cibernética, aunado a las guías ideológicas, permiten un comportamiento colectivo que, en muchas ocasiones, prescinden de Dios».
Finalmente, Jesús Carlos Cabrero exhortó a los feligreses a que, en las próximas fechas, donde iniciará un nuevo tiempo litúrgico, «busquemos replantear nuestros buenos deseos o propuestas que hagamos, para que no sean siempre las mismas. Ahora hay que retomar las cosas y ser esas pequeñas antorchas vivientes que difundirán la luz de la esperanza».