El encargado del despacho de la Junta Estatal de Caminos (JEC), Marcos Enrique Rosales, junto con los representantes de las tres empresas constructoras de los Torres Corzo que trabajan en la obra del nuevo brazo del Distribuidor Vial Juárez comparecieron ante la Comisión de Desarrollo Territorial Sustentable por el desplome de una de las estructuras que estaban en construcción.
Marcos Rosales y compañía repitieron que fue un incidente circunstancial que no afectaría la estructura final de la obra y que, a final de cuentas, se tenía que caer; los diputados sólo movieron la cabeza en aprobación.
Durante la comparecencia, El representante de la JEC señaló que el desprendimiento de la cimbra que provocó el desplome de la obra no tubo consecuencias graves y que seguirán con la obra pues ya llevan un buen avance del 41 por ciento. Además, señaló que todas las pérdidas por este descuido ya fueron absorbidas por las empresas constructoras y que los trabajadores que se vieron afectados ya se encuentran estables.
Como todo ya es agua pasado y ya todos están bien, la JEC indicó que no habrá represalias a las empresas por el incidente y que toda prueba de calidad se hará hasta que ya esté terminada la obra, pues no pueden proceder por que es una obra en proceso.
Por último, reiteraron que como todo ya está bien seguirán trabajando en la construcción del brazo para entregarlo a tiempo. Como si fuera una conferencia, el diputado Rolando Hervert Lara, quien preside la comisión, y sus compañeros legisladores sólo se dedicaron a escuchar a los encargados de tan importante obra sin hacer una sola cuestión sobre la calidad de la misma.
