Un equipo de investigación dirigido por el paleobiólogo Jack Cooper, de la Universidad de Swansea, Reino Unido, ha utilizado el modelado 3D de una columna vertebral para obtener nuevos detalles sobre el megalodón, el superdepredador de los mares que habitó la Tierra hace aproximadamente 20 millones de años y se extinguió hace 3 millones de años.
El megalodón, cuyo nombre científico es Otodus megalodon, fue un tiburón gigante que podía medir hasta 19 metros de longitud y moverse a velocidades superiores a las de cualquier especie de tiburón actual. Según el estudio publicado en la revista Science Advances, el megalodón modelado habría medido casi 16 metros y pesado alrededor de 61 toneladas. Sus dientes, que podían medir hasta 20 centímetros, le permitían devorar presas del tamaño de las orcas en solo cinco mordiscos.
Se estima que un megalodón adulto habría necesitado consumir alrededor de 98,175 calorías diarias, 20 veces más que un gran tiburón blanco adulto. Su capacidad para devorar grandes cantidades de presas le habría permitido viajar grandes distancias sin necesidad de volver a comer.
Además, el megalodón era más rápido que cualquier tiburón vivo, con una velocidad de aproximadamente 4.9 kilómetros por hora, lo que le daba una ventaja para encontrar más presas y satisfacer su enorme demanda calórica.
El megalodón pudo haberse extinguido debido a una lucha por el alimento con el gran tiburón blanco, otro de los depredadores acuáticos más feroces. Un estudio publicado en la revista Nature Communications señaló que pistas químicas en los dientes de tiburones vivos y fósiles del megalodón sugieren que ambos compitieron por las mismas presas, incluyendo ballenas, delfines y marsopas, lo que llevó eventualmente a la extinción del megalodón hace tres millones de años.
Sin embargo, los expertos también destacan que factores ambientales, como los cambios en el nivel del mar, también pueden haber jugado un papel importante en la desaparición de esta especie gigante. Catalina Pimiento, experta de la Universidad de Swansea y participante en el estudio, advierte que aunque la teoría de la competencia con el gran tiburón blanco es plausible, hasta el momento no existe una conclusión definitiva, y podrían haber otras explicaciones para la extinción del megalodón.
El megalodón sigue siendo objeto de fascinación y estudio para la comunidad científica, y cada nueva investigación arroja más luz sobre este superdepredador prehistórico que una vez dominó los mares de la Tierra.
