*El primer paso para conectar su cuerpo con la naturaleza es darse cuenta de que usted es la naturaleza, no separada de ella, sino una parte integral de todo. Su cuerpo está formado por los mismos elementos, minerales y energía que conforman el planeta. Muchos físicos y académicos cuánticos creen que todo en el universo exterior es un reflejo de nuestra conciencia y nuestro cuerpo. El porcentaje de agua en el planeta, por ejemplo, refleja el mismo porcentaje de agua en nuestros cuerpos, etc.
Y aunque es cierto que somos seres naturales, aún podemos desalinearnos con nuestro ser natural. Bienestar es esencialmente estar en sintonía con la naturaleza y alinearnos con la sabiduría inherente que está dentro de todos nosotros. A cierta hora de la noche, por ejemplo, nos cansamos. Ese es el ritmo circadiano natural del cuerpo en el trabajo. Sin embargo, si decidimos ir a dormir o no en ese momento, depende de nosotros. Y no escuchar las señales de nuestro cuerpo (a menudo evidentes, pero a veces sutiles) podría ser la diferencia entre la salud y la enfermedad.
Un nuevo estudio también muestra lo que todos ya saben y sienten: pasar tiempo en la naturaleza reduce drásticamente el estrés e incluso es antiinflamatorio. Los investigadores descubrieron que las emociones positivas experimentadas a través de la naturaleza están relacionadas con niveles más bajos de citocinas proinflamatorias (proteínas que le indican al sistema inmunitario que trabaje más).Conectando con nosotros mismos (una parte de la naturaleza), las señales de nuestro cuerpo y el aire libre son claves para un bienestar óptimo.
Aquí hay 7 excelentes maneras de conectar profundamente su cuerpo con la naturaleza:
Cambia tu estado mental. Date cuenta de que la naturaleza no es solo algo externo en tu entorno, sino una parte de tu propio ser.
La misma agua que fluye en el océano corre por el torrente sanguíneo.
Las mismas vitaminas y minerales en la naturaleza son la misma sustancia a partir de la cual se construyen los huesos y el cuerpo.
El oxígeno que respiramos proviene de una relación simbiótica entre humanos y árboles en la que ambos proporcionamos el elemento necesario para vivir y prosperar.
El fuego que arde para calentar nuestro cuerpo es el mismo fuego en cualquier llama o incluso en el sol.
Nuestros cuerpos son creados a partir de la naturaleza y al final de esta encarnación devolvemos nuestros cuerpos físicos a la Madre Tierra. A través de la meditación y la actividad física al aire libre, nos conectamos naturalmente con nuestro cuerpo extendido.
Observa a las estrellas. Mirar hacia el cielo puede ser una herramienta para trascender la realidad del espacio-tiempo. Muchas civilizaciones antiguas miraron a las estrellas en busca de orientación y poder. Tanto arriba como abajo.
Estamos hechos de polvo de estrellas y aprender sobre las estrellas puede llevarnos más allá de lo mundano y a la conciencia suprema. Al igual que solíamos hacer cuando éramos niños, mirar las nubes es una forma divertida de meditación. Así que de nuevo, miren al cielo por lo que ya está dentro de ustedes, energía pura.
Ir descalzo Nuestra piel respira y absorbe vitaminas y minerales de la tierra. Si va descalzo en la playa, por ejemplo, se dice que los iones negativos de las sales naturales en la arena y el mar tienen magníficos efectos curativos en el cuerpo. Si no estás cerca de la arena, simplemente cavar los pies en la tierra o el suelo puede ser beneficioso. En resumen, deja que la piel de tus pies toque la tierra, la hierba, el suelo o la arena.
Mira al sol y a la luna. Todos miramos a la luna de noche porque es la cosa más brillante del cielo nocturno. Pero, ¿alguna vez has mirado … durante mucho tiempo y sentido la conexión con la luna? Todos sabemos que la luna es responsable de las fluctuaciones en las mareas altas y bajas de los océanos. ¿Pero sabías que la luna también tiene un efecto significativo en nuestro estado emocional o «aguas internas»? Sin mencionar el ciclo menstrual o de «luna» de una mujer, se ve directamente afectado por el aumento y disminución de la luna.
Escucha a tu cuerpo. Es muy simple, cuando estás cansado, dormir. Cuando tengas hambre, come. Cuando estés energizado, mueve tu cuerpo. Cuando tenga dolor, escuche, pregunte «¿por qué?» Y cuídese. Puede ser que necesites un masaje, para estirarte más o tal vez para reducir la velocidad … ya sabes … ¡solo pregunta!
Hazte amigable con los elementos. Ya sea que eso signifique nadar en el océano o ir de campamento al bosque, simplemente, sumérjase en la naturaleza. Aprende sobre los cristales y minerales y sus poderes curativos. Estudie las diferentes plantas, flores, animales y todas las criaturas de la vida.
Puede aprovechar cualquier parte de la naturaleza, porque está inherentemente en usted. No importa cuánto tiempo permanezca en el interior, en un escritorio o bajo iluminación fluorescente. La verdad permanece: usted es la naturaleza y nada puede quitarle eso.
Seguiremos informando
