
El brote de la enfermedad del COVID-19 puede resultarles estresante a algunas personas. El temor y la ansiedad con respecto a una enfermedad pueden ser agobiantes y generar emociones fuertes tanto en adultos como en niños. Lidiar con el estrés permitirá que usted, las personas importantes de su vida y su comunidad se vean fortalecidos. El Centro para el Control y Prevención de Enfermedades emite las siguiente información
El estrés durante el brote de una enfermedad infecciosa puede incluir reacciones como
-Temor y preocupación por su salud y la salud de sus seres queridos
-Cambios en los patrones de sueño o alimentación
-Dificultades para dormir o concentrarse
-Agravamiento de problemas de salud crónicos
-Agravamiento de problemas de salud mental
-Mayor consumo de alcohol, tabaco u otras drogas
Cada uno reacciona de manera distinta a las situaciones de estrés. La forma en que responde al brote puede depender de sus antecedentes, de los aspectos que lo diferencian de otras personas y de la comunidad en la que vive.
Cuídese y cuide a su comunidad: Cuidarse y cuidar a sus amigos y a su familia pueden ayudarle a lidiar con el estrés. Ayudar a otras personas a lidiar con el estrés también puede contribuir a fortalecer a su comunidad.
Formas de lidiar con el estrés
Tómese descansos y deje de mirar, leer o escuchar las noticias. Esto incluye redes sociales. Escuchar hablar de la pandemia reiteradamente puede afectarlo.
Cuide su cuerpo.
Haga respiraciones profundas, ejercicios de estiramiento o meditación
Trate de comer alimentos saludables y comidas bien balanceadas.
Haga ejercicio regular, duerma bien.
Evite consumir alcohol y drogas
Hágase un tiempo para relajarse. Trate de hacer otras actividades que disfrute.
Comuníquese con otras personas. Hable con las personas en quienes confía sobre sus preocupaciones y cómo se está sintiendo.
Conozca los datos para ayudar a reducir el estrés
Entender el riesgo para usted y sus seres queridos puede lograr que un brote resulte menos estresante.
Aprenda y comparta datos acerca del COVID-19 y ayude a detener la propagación de rumores. Al compartir información precisa sobre el COVID-19, puede ayudar a que otras personas se sientan menos estresadas, conectarse con ellas y ayudar a detener el estigma.
Cuide su salud mental
Llame a su proveedor de atención médica si siente que el estrés interfiere con sus actividades diarias por varios días seguidos.
Las personas con problemas de salud mental prexistentes deben continuar con el tratamiento y estar atentas a la aparición de síntomas nuevos o al agravamiento de sus síntomas.
Para padres y madres
Los niños y adolescentes reaccionan, en parte, a lo que observan en los adultos que los rodean. Cuando los padres y los cuidadores manejan el tema del COVID-19 con calma y seguridad, pueden dar el mejor apoyo a sus hijos. Los padres pueden llevar más tranquilidad a quienes los rodean, especialmente a los niños, si están mejor preparados.
Esté atento a cambios de comportamiento en su hijo
No todos los niños y adolescentes responden al estrés de la misma forma. Estos son algunos cambios de conducta a los que debería estar atento
Llanto o irritabilidad excesiva en niños más pequeños
Volver a comportamientos que ya habían superado (como no llegar al baño a tiempo o mojar la cama)
Preocupación o tristeza excesiva
Hábitos de alimentación o sueño poco saludables
Irritabilidad y «berrinches» en adolescentes
Bajo rendimiento académico o faltar a la escuela
Problemas de atención y concentración
Abandono de actividades que antes disfrutaba
Dolores de cabeza o dolor corporal sin motivo
Consumo de alcohol, tabaco u otras sustancias
Formas de brindar apoyo a su hijo
Hable con su hijo pequeño o adolescente acerca del brote de COVID-19.
Responda sus preguntas y ofrézcales información cobre el COVID-19 que sea comprensible para su hijo pequeño o adolescente.
Transmita a su hijo o adolescente la seguridad de que está protegido. Dígale que está bien si se siente disgustado. Cuéntele cómo controla su estrés de modo que pueda aprender a manejar la situación a partir de su ejemplo.
Limite la exposición de su familia a la cobertura de noticias sobre el tema, incluidas las redes sociales. Los niños pueden malinterpretar lo que escuchan y pueden asustarse por algo que no entienden.
Intente mantener las rutinas. Si cierran las escuelas, elabore un cronograma para actividades de estudio y para actividades de descanso o entretenimiento.
Sea el modelo a seguir. Tómese descansos, duerma bien, ejercítese y coma bien. Mantenga una conexión con sus amigos y familiares.
Obtenga más información sobre cómo cuidar a los niños durante el brote de COVID-19 y ayudarlos a lidiar con el estrés que produce una emergencia.
Para personas que corren mayor riesgo de enfermedad grave
Las personas con mayor riesgo de enfermarse gravemente, como los adultos mayores y las personas con afecciones subyacentes, también corren mayor riesgo de sufrir estrés por la situación del COVID-19. Las siguientes son algunas consideraciones especiales:
Los adultos mayores y las personas con discapacidades tienen mayor riesgo de sufrir problemas de salud mental, como depresión.
Los problemas se salud mental pueden presentarse con alguna molestia física (como dolores de cabeza o de estómago) o con problemas cognitivos (como dificultad para concentrarse).
Es más probable que los médicos no detecten problemas de salud mental en:
Personas con discapacidad, porque se concentran en atender y tratar sus afecciones subyacentes, a diferencia de las personas sin discapacidades.
Adultos mayores, porque se puede confundir la depresión como una parte normal del proceso de envejecimiento.
Información completa en cdc.gov