“El uso de la bicicleta como ejercicio aeróbico de bajo impacto permite sostener la actividad durante más tiempo y con menor riesgo de lesión muscular, permite planificar rutas más largas y vistosas, se puede practicar en familia y así disfrutar un día totalmente diferente”, así lo sugiere el Responsable Estatal del Programa de Diabetes de la Secretaría de Salud, Dr. José Domingo Martínez Luna.
El funcionario estatal explicó que la diabetes es una enfermedad crónica que se desencadena cuando el páncreas no produce suficiente insulina, que es la hormona que regula el nivel de glucosa en la sangre, o cuando el organismo no puede utilizar con eficacia la insulina que produce:
“El ejercicio físico constituye uno de los métodos más antiguos empleado en el tratamiento de la diabetes mellitus, y es uno de sus pilares fundamentales junto con la alimentación correcta, la educación en diabetes y el empleo de fármacos hipoglucemiantes para su control”, afirmó.
El Responsable Estatal del Programa de Diabetes de la Secretaría de Salud indicó de manera más específica que el ejercicio físico debe ser principalmente aeróbico:
“En las personas con Diabetes Mellitus el ejercicio debe ser una parte importante de su cuidado, pues con este se incrementa la sensibilidad a la insulina y el consumo de glucosa muscular y hepática, lo que influye favorablemente sobre el control metabólico; se debe tener presente que la indicación del tipo de ejercicio, la intensidad y la duración, deben ser personalizadas pues se busca mejorar la salud y evitar posibles riesgos. Además, a la ejercitación activa se debe agregar un enfoque recreativo, lo que la hace más atractiva y aumenta la adhesión a esta actividad deportiva”.
“Incluso hay otros beneficios que proporciona el realizar ciclismoen pacientes diabéticos pues no solo mejora la sensibilidad a la insulina basal y posprandial, sino que aumenta la utilización de glucosa por el músculo, lo que contribuye a evitar la hiperglucemia. Además, reduce las necesidades diarias de insulina o de las dosis de hipoglicemiantes o normoglicemiantes orales, atrae mejoría de la respuesta anormal de las catecolaminas al estrés, aumenta el gasto energético y de la pérdida de grasa, lo que también contribuye a controlar el peso corporal y evitar la obesidad; mejora en general de la presión arterial y función cardiaca, contribuye a optimar los niveles de las lipoproteínas de alta densidad (HDL- colesterol) y disminuye los niveles de colesterol total y de los triglicéridos, además de que reduce la incidencia de algunos tipos de cáncer, aumenta la masa muscular, evita la ansiedad, la depresión y el estrés, entre muchos más beneficios”, indicó.
Finalmente, el Responsable Estatal del Programa de Diabetes de la Secretaría de Salud, Dr. José Domingo Martínez Luna, dijo que el uso de la bicicleta como medio de transporte o de recreación esuna excelente opción para ayudar a los pacientes diabéticos a lograr su control metabólico y por ende prevenir complicaciones vasculares tanto en ojos, cerebro y corazón.