Según datos de asociaciones civiles como «Huella Amiga», en San Luis Potosí, los casos de maltrato animal siguen incrementando año tras año, y la situación se agrava por múltiples factores interrelacionados. La raíz del problema radica principalmente en el abandono masivo de animales y la falta de medidas preventivas eficaces para frenar este fenómeno.
El maltrato no se limita únicamente a los animales que se encuentran en situación de calle, sino que también ocurre dentro de los propios hogares. Este panorama refleja una preocupante falta de conciencia y de valores en la población, donde muchas veces se facilita el abandono y la violencia hacia los animales desde el núcleo familiar.
Uno de los principales factores que contribuyen a este problema es el crecimiento descontrolado de animales en situación de calle, lo cual se ve agravado por la escasa cultura sobre la esterilización en la población potosina. La falta de campañas de concientización y políticas públicas efectivas para fomentar prácticas responsables de tenencia de mascotas ha llevado a una situación crítica en cuanto al maltrato animal.
A pesar de que en el municipio de San Luis Potosí existe un refugio oficial para animales, la capacidad de este es extremadamente limitada. Este refugio tiene espacio para tan solo 60 animales, cifra que resulta insuficiente para atender la gran cantidad de denuncias recibidas, lo que evidencia la falta de infraestructura y recursos para abordar esta creciente problemática.
