Un peligroso y profundo bache, de aproximadamente 3 metros, sobre el Río Santiago ha sido el causante de llantas destrozadas y rines dañados de autos que se incorporan a esa vía en el cruce con Carretera 57, formando fila de coches lastimados, que, se convierten en un riesgo para los conductores que por suerte esquivan la enorme grieta.
Obras y obras presume Xavier Nava (aunque con fallas en la logística), luminarias y luminarias, mantenimiento en el Río Santiago, pero le hace falta voltear hacia abajo, pues, aún teniendo luz de millones de pesos, es enorme el riesgo de accidentes de mayores dimensiones.
Un bache es la luz verde para su inicio de promesas, luego de registrarse para buscar contender por la gubernatura y, así como este día, habrá muchos más con el «desfile» de carros con llantas partidas, suspensiones dañadas, rines maltratados y con suerte, algunos ponchados.
Ahora tocará a los dueños de los vehículos desembolsar por una «inversión inesperada», porque ahí no se recuerda al pueblo, esos asuntos están entre los que no tienen relevancia para el alcalde de la capital, pero si esa gigante grieta llega a ser producto de un hecho grave, entonces… tampoco le interesará, así como sucedió en Himno Nacional, donde murió un abuelito ciclista por una caída en la supuesta costosa ciclovía.